Un informe apunta el pago de 120 a 200 por iniciativa al trabajador, hasta tres al año
22 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Concello de Lalín estudia la regulación de la productividad de sus trabajadores. El abogado que asesora al ayuntamiento en cuestiones laborales, Miguel Diéguez, redactó para ello un informe sobre el diseño de incentivos a la productividad: se trata de una base abierta a otras aportaciones, pero que fija unas posibles líneas maestras para buscar «un criterio justo, equitativo y objetivo de reparto». La idea es combinar un criterio de reparto por objetivos, que premie las aportaciones de mejora por parte de los trabajadores, de forma conjunta e individual; y un reparto que establezca criterios como asistencia, puntualidad, mejora e interés o asistencia a cursos.
En la productividad por objetivos, se apunta la creación de grupos de mejora con propuestas para mejorar la organización de un servicio, o la optimización de procedimientos. Como cifra orientativa, el informe recoge el pago de 1.200 euros por grupo de mejora que se repartirían los integrantes, hasta un máximo de 200 euros cada uno. Y cada trabajador no podría estar en más de tres grupos de mejora al año. Se plantea un montante global de 20.000 euros anuales. A modo de ejemplo de mejoras, cita la reducción del tiempo de tramitación de las propuestas de adjudicación de contratos administrativos: quince días, en subastas; y de seis semanas en el caso de los concursos.
Las ideas individuales para mejorar servicios se podrían abonar entre 120 y 200 euros, con un máximo de tres por trabajador y año. El importe global sería de 9.000 euros. Las ideas para mejorar los tiempos de respuesta en atención al público aparecen en distintos servicios; para alguno más específico, como Policía Local, se cita desde control de ruidos en motocicletas y establecimientos a retirada de vehículos abandonados en la vía pública.
En cuanto al apartado por otros criterios, se fijarían puntos con un valor en euros para cada punto. Acumularían más puntos quienes fueran más puntuales en el trabajo, asistan más días a trabajar o realicen cursos fuera del horario laboral, y el cumplimiento de objetivos marcados por el jefe de servicio. También se reservaría un porcentaje del 10 % para que la alcaldía pudiese premiar a trabajadores que destaquen especialmente, así como quienes por sus puestos de responsabilidad no puedan participar en varios de los programas de productividad.
Eliminar productividades fijas y marcar criterios objetivos, la idea
El informe plantea la desaparición de las productividades fijas, estableciendo dos repartos anuales y sin que llegue a consolidarse la productividad. Busca que los trabajadores comprendan que es una retribución variable, para incentivar los resultados conseguidos, por lo que cobrarla dependerá del cumplimiento de programas establecidos. Apunta además la conveniencia de incentivar proporcionalmente más a los puestos de las escalas retributivas más bajas del Concello.
En todo caso, subraya que todo el proceso y diseño ha de crearse con el consenso de Administración y sindicatos. El informe se dio a conocer en una de las mesas de negociación sindical celebrada en el Concello, y algún representante de trabajadores apuntó ya que es un informe a estudiar «moi a fondo». También se hicieron ya propuestas sobre la marcha, como incluir un criterio sobre volumen de personas atendidas en servicios al público, porque en algún caso mientras un trabajador atiende a cuatro personas por jornada, otros compañeros atienden a diez o más. Un delegado sindical discrepó además de fijar la puntualidad como criterio para cobrar productividad. Queda mucho debate, pero hay base para su inicio.