Las sanciones se producen por perros sueltos o por las deposiciones en parques
23 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Las quejas vecinales en Lalín por la presencia de perros sueltos en espacios públicos inapropiados o por la proliferación de deposiciones en parques infantiles y jardines se repiten de forma periódica. Pero desde la concejalía de Medio Ambiente quieren zanjar esta problemática. Si en un principio se apeló a los mensajes para concienciar a la ciudadanía, ahora ya se optó por aplicar la normativa vigente. La Policía Local ya actuó y se impusieron las primeras sanciones por incumplir la ordenanza municipal de medio ambiente.
La concejala Celia Alonso confirmaba esas primeras multas aunque eludió cuantificar el número. Sí explicó que la cuantía a abonar por los infractores fue de 60 euros en cada caso, en concreto por la presencia de perros sueltos. «Debemos lembrar aos propietarios que non os poden deixar ceibos por exemplo no carril bici, que pode haber choques e a ordenanza está para cumprirse», recalcó la munícipe lalinense. Aludió a la existencia de numerosos espacios donde los canes puedan correr libremente.
La recogida de los excrementos es otro de los caballos de batalla de la concejalía y donde se seguirá incidiendo, con aplicación de sanciones. «Temos moitos pais e avós que están protestando pola invasión dos cans, está prohibido que entren nos parques», recalcó Alonso, para añadir que «é triste que me estean chamando por elo e a Policía Local ten a orde de aplicar a ordenanza».
«Os cans son os únicos que non teñen culpa pero debemos traballar nesta liña porque é unha cuestión de convivencia entre todos», significó Celia Alonso. La edila de Medio Ambiente aludió a que esas primeras sanciones tramitadas ya están en vía de cobro, tras abrirse expedientes tanto por la actuación de la Policía Local como de la Guardia Civil.
La actual ordenanza de medio ambiente, limpieza y convivencia en Lalín se aprobó hace casi un año. Establece que las infracciones serán sancionadas, tipificándolas como leves, graves o muy graves. Entre las primeras, con multas de hasta 750 euros, se encuentran precisamente las relativas a pasear perros en parques públicos y jardines, así como los potencialmente peligrosos y ensuciar calles con excrementos de animales.
Peludos sen Fogar critica al gobierno local por su actitud hacia los animales abandonados
A la problemática de los canes con dueño, por su presencia irregular en parques y jardines o por los excrementos sin recoger, se suma la de los animales abandonados. El colectivo Peludos sen Fogar cuestionaba esta misma semana la actitud del gobierno local, preguntándose si «al tener contratado un servicio de recogida no interesa lo que le suceda al animal». «¿Por qué no se sanciona a los propietarios que no identifican a sus animales?», planteaban desde la asociación.
Unas críticas surgidas después de recoger Peludos sen Fogar en una sola jornada cuatro perros abandonados en Lalín, comprobándose por la Policía Local que carecían del microchip obligatorio. En estos casos después son trasladados por Protección Civil al centro de recogida de animales de Meis, que gestiona la Diputación, al existir un convenio con el Concello.
Desde la asociación propugnan un giro en la gestión de esta problemática por el Concello. No importa, dicen, porque «soamente son cans».
Un parque de esparcimiento para mascotas que sigue tan solo en proyecto
Entre los proyectos manejados por el gobierno cuatripartito para este mandato figura la creación de un parque de esparcimiento para mascotas, con los perros como principales protagonistas. Por el momento no ha pasado de la fase intenciones, en un proyecto demandado por la sociedad en general y colectivos como Peludos sen Fogar. En un principio se planteó la posibilidad de habilitar estas instalaciones, para las que se cuenta con un diseño infográfico de sus características, en el parque aledaño al colegio Manuel Rivero. Después se desechó por el posible riesgo para los escolares que frecuentan esa zona. Ahora se barajan emplazamientos como O Rodo, respaldado por Alonso, o el propio Paseo Pontiñas.
Hasta 750 euros de multa por los 90 de A Estrada
La normativa lalinense prevé multas de hasta 750 euros por presencia de canes en parques públicos y jardines, así como ensuciar las calles con sus excrementos. Una cuantía que por ahora no se ronda, con las primeras sanciones de 60 euros, según indicó Celia Alonso. Mientras, en A Estrada también se cuenta con un reglamento de protección del medio ambiente, de limpieza pública y de recogida de basura, vigente desde finales del 2000. En el caso de los perros, se califica de infracción leve los incumplimientos por deposiciones, con multas de hasta solo 90 euros.