Un grupo de más de 40 jóvenes de Castellón tuvieron la capital dezana como base para peregrinar de Monforte a Santiago
23 ago 2016 . Actualizado a las 13:03 h.Lalín se sitúa en un espacio con amplias potencialidades dentro del Camino de Santiago para quienes decidan realizar los últimos 100 kilómetros que, a pie o a caballo, permiten obtener la Compostela; y por dos rutas: el Camiño de Inverno y la Vía da Prata. Y en las últimas semanas se puso de relieve, con grupos de peregrinos de Granada y Castellón que tuvieron a Lalín como base de su periplo.
Más de cuarenta jóvenes de la Diócesis de Sergobe -Castellón realizaron los últimos 100 kilómetros por el Camiño de Inverno, desde Monforte, pero con alojamiento en Lalín durante toda la peregrinación. El grupo, compuesto en su mayoría por Scouts de Europa de entre 14 y 24 años, comenzó la primera etapa el pasado sábado día 13 desde Monforte para conseguir llegar siete días después, de mañana, a Santiago: allí cogerían un autobús para visitar Fisterra. Los chicos utilizaron las duchas y los aseos del pabellón polideportivo, con comidas en A Casa do Gato, con menús low-cost. El grupo contactó en Lalín con el párroco, Manuel Salgado, para el que solo tienen palabras de agradecimiento, al igual que para el Concello de Lalín, que les facilitó autobuses para desplazarse durante su estancia. El portavoz del grupo, Guille Leó, lo afirmaba con seguridad y añadía: «Hemos disfrutado tanto de la experiencia, que seguramente repitamos el año que viene».
Durante estas jornadas realizaron varias actividades al aire libre y pudieron visitar el consistorio lalinense, el pazo de Liñares y el molino de Cuíña. También se les pudo ver tocando instrumentos de percusión y bailando en la Praza da Igrexa, después de asistir a misa.
Una representación del grupo tuvo la suerte de compartir un momento histórico como fueron los actos de reconocimiento del Camiño de Inverno, en Rodeiro, como ruta xacobea oficial.
Visitas como las de estos grupos hacen patente la necesidad de una oferta global y completa de servicios en Lalín de los que se puedan beneficiar los peregrinos. Sean cuales sean sus procedencias o recursos económicos, generan negocio en el núcleo urbano, y el objetivo es poder decir: «No pasaron por Lalín, estuvieron y conocieron el Lalín urbano», señala Emiliano García Méijome, de la Asociación de Amigos do Camiño de Santiago por Lalín-Deza.
Hacer de Lalín un atractivo turístico más, beneficiará al municipio más allá de la positiva repercusión que llegará en primera instancia al sector del hospedaje y la hostelería. Es un objetivo en el que trabaja el colectivo con el Concello, que se reforzará cuando se habilite el viejo Rivero como albergue de peregrinos.