El Concello se marca el objetivo de concluir las actuaciones en un plazo de dos años
28 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Conseguir que Lalín se convierta en referencia para las villas medias gallegas en materia de accesibilidad y movilidad. Un ambicioso objetivo a dos años vista, plazo marcado por el Concello para ejecutar un plan cuya base de partida es un informe de la asociación Working Wheels e incluye cincuenta actuaciones. El gobierno local activará un programa mixto, como destacó ayer el edil de Obras, Francisco Vilariño, con trabajos a cargo de la brigada municipal y adjudicación de contratos externos.
El proyecto de accesibilidad se presentó ayer en el consistorio con presencia del regidor, Rafael Cuíña, el teniente de alcalde y edil de Urbanismo, Nicolás González, además de Vilariño y de Álex Ferradás, autor del trabajo dentro de Working Wheels sobre carencias en movilidad en Lalín. Los tres ensalzaron el estudio elaborado por la asociación sobre el que se basarán las primeras actuaciones pero «non é ríxido senón aberto e xa hai algunhas máis detectadas», incidió Vilariño. Pero cualquier vecino podrá avisar de cuestiones a corregir. Para ello se abrirá un banner en la página web del Concello donde realizar aportaciones.
El gobierno local fijó una inversión global máxima de 150.000 euros para estos trabajos centrados en el casco urbano y la «conexión ruralurbano», como la denominó González Casares, con núcleos conectados de facto con el casco lalinense. «Trátase dun orzamento considerable para acadar o obxectivo», resaltó el concejal de Obras. Buscarán posibles subvenciones de otras administraciones, desde Fomento a Xunta o Diputación a través de planes de obras, pero aún sin contar con financiación externa está blindada la ejecución del programa con recursos propios.
Paco Vilariño destacó que la próxima semana ya se cursarán solicitudes a las administraciones afectadas en sus viales, para plantear la posible ejecución de las obras por su parte o en todo caso para que autoricen actuar al Concello. Demandan desde el gobierno local agilidad en la concesión de permisos para ejecutar un plan calificado de prioritario. También recordaron la ejecución de acciones ya en ese sentido con pintado de plazas para vehículos adaptados o rebaja de aceras.
Licencias más exigentes y pasos en el sector comercial y hostelero
Casares destacó los esfuerzos en garantizar la seguridad vial en la trama urbana, donde se englobaría la mejora de la accesibilidad, además de obras para calmado del tráfico. Vilariño destacó las actuaciones previstas como elemento diferenciador de los objetivos del nuevo gobierno «na xestión dos recursos públicos en igualdade». A este respecto incidió en mayor rigurosidad por ejemplo en la concesión de licencias desde Urbanismo.
El edil de Obras recordó que el 12 % de la población presenta algún problema de discapacidad, requiriéndose actuaciones de movilidad no reducionistas, pues por ejemplo se beneficiarán peatones que porten sillas de bebé, en un marco de medidas para favorecer la integración.
«Nos metemos presión e hai un compromiso político do goberno para que sexa así e que Lalín sexa o concello de Galicia máis accesible», sentenció Vilariño. El regidor incidió en ese objetivo con el fin de convertirse en modelo a copiar, como ocurre ya con las políticas de empleo. Los tres representantes agradecieron a Álex Ferradás su colaboración, quien resaltó la accesibilidad «é un dereito e non un privilexio». Se habló de que establecimientos comerciales y hosteleros avancen también en ese objetivo. Y Casares aludió a mejoría.
Los accesos al casco urbano, rotondas y calles Ponte y Areal, entre las más conflictivas
El informe base para ejecutar este plan, elaborado por Álex Ferradás, establece más de medio centenar de actuaciones para mejorar la accesibilidad. Incidió su autor sobre todo ayer en la presentación del proyecto en la situación de los principales acceso a Lalín, por ejemplo desde Agruchave, Filgueira o Lalín de Arriba, así como en la zona del estadio Manuel Anxo Cortizo junto con cruces en la circunvalación. Carencia de aceras, necesidad de cruzar de un lado a otro en rotondas y con el consiguiente riesgo para personas con movilidad reducida o discapacidad son algunos de esos problemas en estos puntos.
Ferradás resaltó además la situación de tramos de la calle Ponte, con aceras que requieren adecentarse y evitar su remate en escalones en varios puntos. Y citó la rúa Areal, en el tramo entre el pabellón municipal y el centro comercial Deza, como una de las más conflictivas al no existir aceras en varios puntos. En otros lugares del casco urbano «farían falta arranxos pero máis sinxelos, con pequenos rebaixes nas beirarrúas para cumprir a normativa e mellorar os desprazamentos», destacó. Sí destacó la participación de «moita xente para solventar este tipo de problemáticas», difiriendo mucho la situación a hace unas décadas, cuando las personas con discapacidad quedaban relegadas a no salir de casa.
«Hai camiño andado pero moito por facer», dijo Ferradás, con medidas para facilitar la movilidad no solo a personas con discapacidad al beneficiarse también un alto porcentaje de la población, como los mayores.