«La salud bucodental es para muchos una materia pendiente»

amelia ferreiroa LALÍN / LA VOZ

LALÍN

María Fontán Suárez, en las instalaciones de la clínica Clinident en Lalín.
María Fontán Suárez, en las instalaciones de la clínica Clinident en Lalín. miguel souto< / span>

Los que más se preocupan son los jóvenes, en buena medida, por estética

28 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Llega años formándose en el mundo de la salud pero asegura, pese a sus diplomaturas, licenciatura y numerosos cursos realizados, que le resta todavía mucho por aprender. «Llevo toda la vida estudiando y lo que me queda!», apostilla María Fontán Suárez. Licenciada en Odontología, con diplomaturas en Enfermería y Educación Social, técnico superior en higiene dental y perito calígrafo son solamente algunos de los estudios cursados por la gerente de Clinident en Lalín.

-Desde el año 1986, con la publicación de la Ley 10/86 del 17 de marzo, se define el perfil profesional del higienista dental. ¿Cuál es su función exactamente?

-Pues con una Formación Profesional de 2º grado, las funciones de un higienista dental son fundamentalmente preventivas, además de incidir en todo lo relacionado con la promoción de la salud y la educación sanitaria bucodental de toda la población; haciendo una especial mención y atención a los chavales de infantil, a escolares y también al colectivo de la tercera edad. Nuestro trabajo se centra en dar todas las instrucciones precisas para disfrutar de una óptima higiene oral e insistir en la necesidad de que se lleven a cabo los pertinentes exámenes de salud. Por otra parte un higienista dental también puede realizar determinados tratamientos como son, por ejemplo, las tartrectomías; que consisten en la eliminación de cálculo dental o masa mineralizada adherida a los dientes para lograr una limpieza dental con ultrasonidos e instrumentos odontológicos especiales.

-Lo que se conoce de manera coloquial como limpiezas bucales...

-Exactamente. Un higienista dental también está cualificado profesionalmente para realizar sellados de piezas definitivas o asistir al odontólogo. Otra de las posibilidades, dentro del amplio espectro de esta nuestra profesión, está participar en estudios epidemiológicos así como tomar parte en la recogida de datos de los pacientes que se acercan a las clínicas dentales.

-¿Qué supervisión realizan?

-Nos ocupamos de supervisar las medidas higiénicas y preventivas, ya sean individuales o colectivas.

-Se habla muchísimo y en reiteradas ocasiones de higiene dental pero, ¿qué se entiende por la misma?

-No deja de ser una manera de cuidar nuestra salud. Algo importantísimo y, dentro de la higiene diaria, no podemos olvidarnos de la higiene bucal.

-¿Nos preocupamos de la misma o todavía permanece en el olvido?

-La realidad, y una verdad palpable, es que la salud bucodental es para muchos una materia pendiente. Cierto es que se produjo un gran avance respecto de esta cuestión entre la población joven, al encontrarnos con que este segmento poblacional es más consciente de la importancia de mantener una buena higiene dental, de que se trata de una cuestión de salud además de estética.

-¿Esa misma actitud es aplicable a personas mayores?

-En términos generales no pero como en todo nos podemos encontrar variabilidad. En lo que respecta a la población mayor pensemos que no tuvo una educación al respecto por lo que no le suele dar importancia y ello redunda en que veamos con bastante asiduidad bocas realmente abandonadas. La mayoría de la población no se da cuenta que una óptima salud bucodental, además de paliar dolor y molestias, influye en evitar enfermedades y ésto contribuye al bienestar general de la persona.

maría fontán suárez higienista dental

«Hacemos tartrectomías y sellados de piezas y asistencia al odontólogo»

«Una buena salud va a paliar dolor

y molestias y evita determinadas enfermedades»

«La crisis nos deja un quiero pero no puedo»

En el ámbito de la higiene dental resta todavía mucho por avanzar, puntualiza María Fontán.

-Es la realidad. En esta nuestra zona, como en otras muchas, falta concienciación pese a que se impartió alguna charla a nivel colectivo, a escolares concretamente y a nuestros pacientes pero aún así la población sigue sin darle importancia a este tema. Hemos hecho esfuerzos a la hora de informarles sobre el uso de la seda dental, superflos, cepillos interproximales y técnicas de cepillado pero está claro que habrá que insistir y continuar para dar con los resultados que estamos buscando.

-Para determinadas personas el acudir a una clínica odontológica se asocia a dolor y molestia, ¿son tiempos pasados?

-Totalmente. En los tiempos actuales y dentro del «Programa do Neno San» está el apartado bucodental en el que desde la consulta de pediatría se remite al niño al dentista para hacerles revisiones bucodentales periódicas. Es un programa que va desde los 18 meses y con ello el niño ya adquiere el hábito de acudir al dentista de forma rutinaria, para tener una salud bucodental controlada y en óptimo estado, y a la par pierde desde la tierna infancia ese posible temor que le pudiese surgir a la hora de entrar en la consulta del especialista.

-¿La crisis económica, que afecta a todos los sectores, también pasa factura a las clínicas dentales?

-Claro. La crisis afecta también al sector dental a pesar de que sea un factor importante dentro de la salud. Por poner un simple ejemplo, claramente ilustrativo de esta situación es el hecho de que antes de que se materializara esta situación, los pacientes estaban más concienciados que sus antecesores a la hora de mantener en mejor estado la boca. Ante el azote de la situación económica ya restaurar y reponer piezas perdidas u ausentes ya no es precisamente un hábito cotidiano entre muchas personas. Actualmente, y por limitaciones económicas, en muchos casos nos encontramos con personas que quieren pero desafortunadamente no pueden reponer esas piezas que fueron perdiendo o que les faltan.

-¿La situación es exactamente la misma en el caso de los chavales?

-Entre la población infantil nos encontramos con que se quitan de nuevo más números de piezas porque desde el punto de vista económico sale más barato que proceder a restaurarlas. La situación es la que es y se intenta ahorrar en lo que se puede.

«A los niños saharauis de acogida los tratamos de forma altruista»

Países como Suiza o Alemania ponen a disposición de los habitantes determinados tratamientos odontológicos subvencionados por el gobierno. Lugares en los que la población residente, desde la más tierna infancia, debe acudir a revisiones periódicas.

-Son revisiones obligatorias ya que, de lo contrario, se verían excluidos del sistema sanitario. A pesar de estas ayudas los costes son mucho más elevados que en España, y buen ejemplo de ello, es que en la clínica tenemos muchos pacientes que aprovechan sus vacaciones para hacerse tratamientos bucodentales porque les salen más económicos; a pesar de que en los países en los que viven cuentan con ayudas no son suficientes para hacer frente a los costes de los tratamientos.

-¿España debería de contar con una ayuda de esas características?

-Creo que el sistema europeo tiene poca viabilidad en nuestro país. En nuestro caso, aún sin cobrar las revisiones y recordándolas, algunos pacientes no acuden con regularidad por lo que pienso que no sería efectivo ese sistema aquí.

-De manera personal y altruista colabora con los niños saharauis y con el colectivo de voluntarios O Mencer...

-Al igual que durante varios veranos a los niños saharauis de acogida los tratamos en la clínica de forma altruista. Por otra parte y a petición de la asociación O Mencer, que realiza una labor humanitaria extraordinaria, colaboramos con ellos en la atención bucodental a unos cincuenta chavales.