Los primeros peregrinos de la Ruta dos Arrieiros cruzan el municipio
17 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.De las nueve rutas históricas reconocidas por la Xunta como caminos jacobeos solo la Vía de la Plata ?que discurre por San Miguel de Castro? toca suelo estradense. Sin embargo, existen fuertes indicios que apuntan a la existencia de otro camino medieval que entraría en el municipio estradense desde Soutelo de Montes y atravesaría Codeseda y A Estrada de camino a Compostela. Ese Camino es el que reivindica la asociación Codeseda Viva y el que acaban de estrenar tres portugueses con ganas de aventura que se han convertido en los primeros peregrinos contemporáneos de la denominada Ruta dos Arrieiros.
Luis Sobreiro, María João y João Filipe Reis son tres caminantes enganchados al Camino. El año pasado hicieron el Central Portugués, de Oporto a Santiago, y este año se propusieron buscar el itinerario más antiguo para alcanzar Compostela desde tierras portuguesas. En su empeño por identificar el camino auténtico contactaron con la Asociación Xacobea de Braga, que les puso en contacto con el historiador Armandinho Cunha, de la Cámara de Braga. Este les informó de una parte del recorrido y les derivó a la Asociación Xacobea de Ribadavia, donde Abdón Fernández les detalló el itinerario para el que se está buscando el sello oficial y les remitió también a la Asociación Codeseda Viva.
Recepción oficial
Con toda esa información en su poder, los caminantes emprendieron ruta desde Braga el pasado 6 de mayo y, a golpe de etapas de 25 o 30 kilómetros diarios , alcanzaron el lunes Codeseda y ayer A Estrada capital, donde fueron recibidos por el alcalde, José López. «Nunca imaginamos esto», confiesa María João sorprendida. Según explica, el Camiño dos Arrieiros les ha proporcionado una experiencia completamente diferente a la ruta oficial realizada el año pasado. «En el otro encontramos un montón de peregrinos alemanes, polacos, australianos... e hicimos muchos amigos. En este éramos los únicos peregrinos, pero el encuentro fue con la gente de los pueblos, que nos dio muy buena acogida», explica.
Los peregrinos están completando su cartilla con sellos extraoficiales en bares y hoteles que certifican los 280 kilómetros que completarán a pie. No es seguro que les den la Compostela, pero lo intentarán. Además, recomendarán la experiencia y quizás utilicen todo el material que como pioneros están recogiendo para potenciar la ruta y ayudar a otros caminantes a seguirla.