Demandan incrementar aulas y docentes tras quedar siete niños sin plaza
06 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.La Escola Unitaria de Donramiro tiene para el curso que viene más demanda que plazas. En principio se quedaron fuera siete familias, lo que llevó a los afectados a iniciar una recogida de firmas y demandar una ampliación del centro. Ayer varios miembros de estas familias presentaron las rúbricas en el Concello de Lalín y mantuvieron un encuentro con la edil de Educación, Lara Rodríguez para exponerle sus peticiones.
Las familias valoran especialmente la atención individualizada de la escuela, que imparte solo clases de Educación Infantil, su proyecto educativo y la buena calidad educativa.
Se alaba el método pedagógico, además de la cercanía y comodidad para los padres que residen en esta zona semiurbana. Precisamente esa condición es la que les lleva a pensar que la ampliación es necesaria también pensando en el futuro.
Desde el Concello, la edil de Educación atendió sus demandas y apuntan, «falará coa Inspección» a quien trasladarán la demanda y la posibilidad de contar en la escuela con dos unidades en vez de una, que es la que existe ahora.
La ampliación supondría la realización de alguna obra porque se necesitarían dos aulas. Los padres explican que Lara Rodríguez les indicó que si se trata de una obra de carácter menor no cree que el Concello tuviese problema en afrontarla, siempre y cuando Educación conceda el desdoblamiento y una unidad más al centro educativo. Las familias querían plantear la petición antes del día 15, fecha en la que salen las listas definitivas y esperan que el curso que viene lan escuela pueda atender a todos los niños que pidieron plaza.
Un aula más supondría también el envío de un maestro o maestra más, una por aula, y la realización, apunta «dunha pequena obra para a ampliación da aula». Paralelamente están también recogiendo firmas entre los vecinos de Donramiro resaltando que «a iniciativa vai máis alá do vindeiro curso escolar e implica a garantía de manter a escola de cara ó futuro, o que os veciños consideran beneficioso para a súa comunidade».
La reivindicación, recuerdan, es también una petición en defensa y a favor de los colegios del rural y «o dereito das familias a escoller un método pedagóxico de ensino basado no respecto ao neno e aos seus ritmos de aprendizaxe», afirman.
Un precedente en el colegio de Figueiroa de A Estrada
En las dos comarcas tradicionalmente cada curso tanto en el colegio Manuel Rivero como en el Figueiroa de Lalín la demanda de plazas supera la oferta. Ambos son colegios urbanos y de mucho menor tamaño que sus hermanos mayores el Xesús Golmar lalinense y el Pérez Viondi en A Estrada, que cuentan con un número mayor de unidades.
Son pocos los cursos en los que todas las familias que demandan plaza en estos centros la obtienen. En el colegio de Figueiroa en el curso 2014-2015 se creó en el centro, con carácter excepcional, una tercera unidad para dar cabida a una decena de alumnos, algunos con hermanos en el centro.
En el caso del colegio estradense la medida solo se llevó a cabo ese curso y Educación advertía que solo se podía hacer de esa manera porque el centro no disponía de espacio suficiente para albergar tres aulas por curso. La Xunta no prevé, en este caso, ampliar ya que el Pérez Viondi, que también está en el casco urbano, dispone de un edificio nuevo de Infantil y no tiene problemas de espacio.
En este caso, las familias consideran que solo haría falta una pequeña obra de adaptación para poder albergar una segunda unidad, pero entienden que la última palabra la tendrán los técnicos y los arquitectos.
Lo que sí no tiene debate es la calidad educativa de la escuela unitaria ubicada en la parroquia de Donramiro, que se traduce en un sinfín de actividades que realizan los niños dentro de su aprendizaje y la atención individualizada que reciben. Algo que para las familias que demandan la ampliación es indiscutible y que refrenda la alta demanda de plazas que tiene esta escuela.