Emerxencias entre dos aguas

Rocío García Martínez
rocío garcía A ESTRADA / LA VOZ

A ESTRADA

A Estrada aprobó en pleno pedir el traslado del 112 y el 061 a la Axega y Santiago pidió que se paralice.
A Estrada aprobó en pleno pedir el traslado del 112 y el 061 a la Axega y Santiago pidió que se paralice.

PP, PSOE y BNG manejan dos discursos diferentes sobre el traslado del 112 y el 061 a la sede de la Axega: uno para A Estrada y otro para Santiago

09 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La coherencia no suele ser el fuerte de los políticos. Y menos cuando hay por medio asuntos delicados con visiones localistas totalmente opuestas. Es el caso del traslado a la nueva sede de la Axencia Galega de Emerxencias (Axega) en A Estrada de los servicios del 112 y el 061 afincados ahora en Santiago. En la capital gallega trabajadores y sindicatos se han puesto en pie de guerra contra el traslado. Para cualquier partido, lo más cómodo es apoyarles. En A Estrada, en cambio, ya está construida la nueva sede. Aunque la mayoría de los vecinos creen que el traslado les va a afectar más o menos tanto como les afectó en su día la apertura de la Academia de Policía -es decir, más bien poco-, casi todos ven con buenos ojos el traslado. Puede que no sea tan bueno como vende el alcalde estradense, José López, pero malo no puede ser. Conclusión: Santiago pide que los servicios permanezcan allí y A Estrada que se trasladen.

Esta dualidad tiene mal encaje en partidos políticos que trascienden el ámbito local. Es difícil contentar a dos bandos y al mismo tiempo ser coherente.

Aún así, los partidos que se han visto en esta tesitura lo han estado intentando estos días con indefiniciones y medias tintas con las que se atacan mutuamente.

El BNG de Santiago llevó a pleno una moción para pedir a la Xunta que el 112 y el 061 se queden en la capital. La moción se aprobó allí con el respaldo del PSOE y de Compostela Aberta. Nacionalistas y socialistas se declararon allí plenamente a favor de tal medida. En A Estrada, en cambio, ante la moción presentada por el PP reivindicando exactamente lo contrario -es decir, que los servicios se trasladen a A Estrada- el PSOE votó a favor. El BNG estradense navegó como pudo y apostó por la abstención. No se opuso radicalmente al traslado como hicieron los nacionalistas compostelanos, pero tampoco le dio su aprobación.

La misma maniobra de despiste fue utilizada por el PP. En A Estrada impusló la moción en defensa del traslado e intentó sacarle los colores a otros partidos. En Santiago, en cambio, tampoco fue tan vehemente en la defensa de A Estrada como capital de las emergencias gallegas. A pesar de que la decisión del traslado la tomó la Xunta amiga y de que ahora ya es un hecho la construcción de la nueva sede, en la que se han invertido 8 millones de euros, en Santiago el PP no votó directamente en contra de la propuesta nacionalista de dejar los servicios en la capital. Lo que hizo fue abstenerse y plantear otra moción pidiendo que se compense a los trabajadores por los costes del traslado, que se ponga en marcha el transporte metropolitano y que la Xunta se comprometa a finalizar la autovía Santiago-A Estrada. La propuesta no prosperó. Solo el PP votó a favor. El PSOE compostelano se pronunció en contra sin rubor y el BNG, de nuevo, navegó en la abstención.