Vecinos de Arenal soportan tres cortes de agua de horas en 5 días

Olimpio Pelayo Arca Camba
o. p. arca LALÍN / LA VOZ

DEZA

miguel souto

La antigüedad de la tubería, aún en fibrocemento, causa constantes averías que generan fuertes críticas de residentes y negocios de la calle lalinense

11 dic 2014 . Actualizado a las 05:41 h.

Eso de que la mala suerte va por barrios lo tienen contrastado con el agua en la calle Arenal. Los cortes de agua son una constante que se repite, aunque la causa nada tiene que ver con el destino y sí con una red de abastecimiento obsoleta, todavía en fibrocemento, con reiteradas roturas que hacen imposible un suministro normalizado. De esta forma, en los cinco días que van del pasado sábado a ayer miércoles, hasta tres roturas se registraron en la zona, según fuentes vecinales. El sábado faltó desde las 18 horas hasta la 1 de la madrugada, mientras ayer el corte comenzaba hacia las 6 horas de la madrugada y comenzaba a restablecerse el servicio pasadas las 13 horas.

Pero la de ayer, como los terremotos, fue una avería con réplica: cuando los residentes en la zona concluían la habitual apertura de grifos para que el agua eliminase turbidez e intentar recuperar la transparencia ?«temos que estar uns 20 minutos cos grifos abertos a tope para que salga ben»?, nuevo corte: comenzó hacia las 16.30 horas y se prolongaba unas tres horas, con presencia de nuevo de operarios de Espina y Delfín en la zona de la avería matinal.

Reclamaciones por daños

Los constantes cortes causan evidentes trastornos a los vecinos, pero también a propietarios de negocios situados en la calle Arenal, como bares y cafeterías. Desde Bodegón O Petisco, apuntaba Manuel Varela los problemas para fregar loza, y sobre todo el hecho de no poder usar la cafetera industrial: «Eu trouxen unha cafetera pequena de cristal, para atender aos clientes, pero esto non pode ser». Además, surgen averías, como la rotura de un termo de agua, por la que el empresario presenta reclamación ante empresa y Concello.

El concejal de Obras, Camilo González Bodaño, reconoce la elevada antigüedad de la red de aguas de la zona, en fibrocemento. Indica que la concesionaria acude para solventar cada avería que se produce, «e se rompe un metro, pois cambian 20 ou 30». Pero es un parcheo a todas luces insuficiente, porque faltan otros 500 metros por sustituir, y las averías se reproducen de forma incesante. La solución pasaría por desterrar, de una vez por todas, la canalización en fibrocemento y dar a los vecinos el servicio por el que pagan: tendrán que negociar entre Concello y concesionaria acometer esa obra.