Liñares es ya el pazo de todos

Olimpio Pelayo Arca Camba
o. p. arca LALÍN / LA VOZ

DEZA

miguel souto

Los cuatro grupos municipales asistieron a la multitudinaria inauguración

20 sep 2014 . Actualizado a las 13:13 h.

Hay proyectos que están por encima de partidos y de administraciones: la rehabilitación del pazo de Liñares es uno de ellos. Por eso el inmueble adquirido en el 2002 por el Concello lalinense logró la financiación de tres administraciones ?Gobierno estatal, Xunta y Diputación?, y por eso la multitudinaria inauguración que vivió ayer contó con la asistencia de representantes de los cuatro grupos municipales, que se sumaban a una amplia lista de autoridades, empresarios, personalidades de la cultura y vecinos que entraron a un pazo que es ya de todos.

Así lo expresaba el alcalde José Crespo, al señalar que el emblemático edificio tuvo su época de esplendor a finales del siglo XIX con la familia Taboada y ahora, siendo ya de todos, lo recuperará como espacio cultural. Crespo tuvo palabras de agradecimiento a cuantos hicieron posible la rehabilitación de un pazo comprado por 677.000 euros para ser Parador Nacional, y que truncada esa posibilidad tras un hundimiento del Prestige que reservó ese privilegio a Muxía, buscó nuevas alternativas como espacio cultural. Y financiación, que encontró con el ministro socialista José Blanco y el 1 % cultural de Fomento, complementada luego con aportaciones de Xunta y Diputación, hasta sumar más de 4 millones de euros en una rehabilitación en la que los arquitectos Javier Bugallo y José María Rubio, como bien dijo el presidente de la Diputación, Rafael Louzán, «fuxiron de alardes e de protagonismos arquitectónicos».

El presidente de la Xunta, Núñez Feijoo destacó la colaboración entre administraciones en estas obras, así como el valor de construcciones tradicionales hechas en años con mucha menor tecnología que la actual, que sin embargo deja edificios para sustituir, no para rehabilitar. Doce meses después de inaugurar el consistorio, Feijoo dijo que empieza a ser tradición asistir a Lalín cada año a estrenar grandes obras, y en tono irónico pidió prudencia a Crespo en lo que organice para el 2015.

fiestas de as dores