Lalín tuvo siete escuelas pagadas por indianos, de las que perviven cinco

O. P LALÍN

DEZA

Cuatro de ellas continúan con actividad pública como centros sociales, y una es vivienda particular

17 abr 2014 . Actualizado a las 21:09 h.

«As escolas da emigración» es un proyecto del Arquivo da Emigración Galega, del Consello da Cultura Galega y de la Secretaría Xeral de Emigración de la Xunta que recupera el amplio legado educativo de los indianos, como se conocía a los gallegos que hacían fortuna en América. Lalín llegó a contar con siete escuelas sufragadas por emigrantes a aquel continente, de las que en la actualidad se conservan cinco. De ellas, cuatro se mantienen como centros sociales: se trata de las de Alemparte, Galegos, Soutolongo y Vilanova, mientras la quinta de aquellas escuelas es en la actualidad una vivienda particular la que fue en su día escuela Ramón González Vigide.

Las dos construcciones desaparecidas son, por una parte, el Hospitalillo de Lalín. Había sido inaugurado en septiembre de 1924, impulsado por Hijos del Partido de Lalín en Buenos Aires como hospital-asilo y escuela. Fue derrumbado en el año 1952 para construir en el solar que ocupaba el instituto de capacitación agraria, que hoy es el instituto Laxeiro. El otro inmueble desaparecido es la escuela Manuel Curros Enríquez, que funcionó en la parroquia de Prado, un edificio que fue derrumbado a principios de la década de los años 70 para construir el actual colegio público de Prado.

Entre los indianos lalinenses destacan los hermanos González Gamallo, de Soutolongo, claves para la construcción de su escuela; o Gumersindo Asorey Blanco, que colaboró estrechamente para la de Gresande; así como Casimiro Gómez Cobas, que aunque natural de Cotobade, ayudó mucho a los lalinenses.