Fueron a buscar las ovejas a media tarde de ayer y las encontraron muertas, seguramente un par de horas antes, sobre las tres. Dos ovejas mordidas en su parte trasera y un carnero también muerto, seguramente por estrés de la persecución. Los animales fueron acorralados por el lobo en la antigua casa rectoral de Santiso. Un salido exterior está rodeado de alambre de espino y protegía los ovinos pero entre el lobo y todos acabaron en el interior donde realizo el ataque. Los propietarios (la titular es María Rosa Taboada) estiman que es el lobo «pola maneira de atacar as ovellas», según indica el hijo.
Los animales los tiene esta familia de jubilados como entretenimiento y ya en una ocasión sus ovejas habían sufrido ataque pero entonces habían sido perros. Ayer denunciaron oficialmente el daño y aguardaban la visita para evaluar el daño. Estiman que el valor puede alcanzar «unhas trinta mil pesetas (180 euros), porque son reses jóvenes, de dos o tres anos y una oveja preñada.
Los afectados además de los daños alertan de la entrada del lobo hasta un entorno con población, en medio de un lugar muy próximo a la iglesia de Santiso y además realizar el ataque a plena luz del día.