El decreto del gobierno central obliga a los concellos con deudas pendientes anteriores al 1 de nero del 2012 a presentar antes del día 31 de marzo un plan de viabilidad que defina cómo harán frente al pago de las facturas que acaban de relacionar. Del texto se desprende también que los concellos deben recurrir a la solicitud de préstamos oficiales para saldar las deudas. Muchos alcaldes consideran injusta esta inflexibilidad y recuerdan que, en muchos casos, los problemas de impago se derivan de las retenciones de los pagos que deberían haber formalizado hace meses otras administraciones supramunicipales.
El alcalde de Cerdedo, José Balseiros, aseguró que «moitos concellos non teriamos deudas se as administracións supramunicipais nos pagaran o que nos deben de convenios e obras polos que tivemos que adiantar nós os cartos». Balseiros aseguró que en el mes de diciembre acumulaba «case 650.000 euros de cobros pendentes doutras adminsitracións». La cifra es ahora de 420.000, «máis do doble do que nós debemos».
Evitando obras
Aseguró que hay pagos que tienen que adelantar los concellos que se retrasan más de un año e indicó que, para evitar trastornos de liquidez Cerdedo y otros concellos en la misma situación han decidido no solicitar obras en las que la administración local tenga que aportar el 30%.
Por su parte, el gobierno de Forcarei recordó también que tiene pendientes de cobro 609.515 euros que serían más que suficientes para pagar a proveedores.
El alcalde de Agolada, Ramiro Varela, se queja también de los pagos pendientes de la Xunta por distintos conceptos, entre ellos algunos cursos. Varela apunta que «si tiveramos da Xunta todolos pagos ó día a débeda nos quedaría nun millón». El regidor echa la culpa «a problemas que viñamos arrastrando de vello» y destaca que «temos unha flota de coches para servicios importante que acarrea moitos gastos, escola de música, un servizo a domicilio que atende a 160 persoas e que imos ter que reestructurar».
Más tasas o menos servicios
Por su parte, la alcaldesa de Silleda, Paula Fernández, explica que para definir el plan de viabilidad que habrá que tener listo antes del día 31 «non nos queda outra que subir as taxas ou reducir servizos».
«Se cobraramos os pagos retidos hai meses por outras administracións non faría falta crédito»
José Balseiros