El Deportivo sale del oscurantismo

Vicente Leirachá
Vicente Leirachá PUNTO DE MIRA

TORRE DE MARATHÓN

27 nov 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

El deportivismo, al fin, vivirá una etapa en la que sus preocupaciones las marcará el comportamiento del equipo en los partidos, pero no como vino sucediendo en los últimos 20 años, periodo nefasto que duró tanto tiempo porque el consejo directivo de Lendoiro estuvo apoyándose en falsedades que, tal como sucede siempre, terminan por descubrirse. Ya lo dice el refrán: «No hay mal que cien años dure...», y el dicho se confirma ahora. Duró tanto tiempo que llegó un momento en que el Real Club amenazaba con venirse abajo y se evitó (?) parece que a tiempo aunque requerirá un plazo para que el centenario Deportivo vuelva a una etapa en la que impere la claridad, dejando atrás esa gestión opaca que algunos aceptaban sin reparos por ignorancia. Increíble, pero cierto y vergonzoso que ese proceder en la gestión haya durado tantos años.

El deportivismo, que conserva un sólido sentimiento de lealtad hacia su club, respirará tranquilo una vez desterrado el temor -que existía- a una desaparición que parecía estar pendiente de un hilo. A partir de ahora, los sufrimientos vendrán de los resultados que se alcancen en los partidos, pero no nacerán de una gestión que puede ser errónea pero nunca se presentará, esperamos, envuelta en falsedades que más o menos tarde terminan saliendo a relucir, como sucede ahora tras esa larguísima etapa en la que las mentiras se vestían de verdades falsas y lo triste es que algunos deportivistas las creyeron durante largo tiempo. Y es que los aficionados al fútbol resultan muy ingenuos, creyendo verdad aquello que les cuentan y pintan como un favor al club.