El consejo rebaja el presupuesto calculado por el anterior presidente y deja el de la actual campaña en 30 millones de euros

La Voz

TORRE DE MARATHÓN

23 oct 2014 . Actualizado a las 05:00 h.

Tras haber rechazado la junta las cuentas presentadas por Lendoiro en el mes de diciembre del año pasado, la próxima reunión de socios tendrá que votar, de nuevo, las que presente Tino Fernández.

En lo que al presupuesto se refiere, el consejo de administración ha rebajado considerablemente el que había presentado Lendoiro a votación y sobre el que pretendía cobrar el 1 %. En su momento, el dirigente blanquiazul estimaba los ingresos en 23 millones de euros y los gastos en 18, mientras que Tino Fernández ha situado los ingresos en menos de diez millones de euros. La rebaja, entre otros aspectos, está en que Lendoiro había contabilizado 4 millones de seguro de descenso que, al parecer, al Deportivo no le correspondía cobrar.

En cuanto al presente ejercicio, el consejo someterá a juicio de los accionistas unos ingresos de 30 millones de euros, lo que propiciaría unos beneficios de 6,2 millones. De cumplirse, este superávit permitiría afrontar el primer pago previsto en el acuerdo singular con la Agencia Tributaria y todavía quedaría dinero para seguir rebajando deuda.

Presupuestos no inflados

De esta forma, el Deportivo deja atrás la época de presupuestos inflados que permitieron a Lendoiro cobrar durante años decenas de miles de euros más de lo que le correspondía si hubiera ajustado la previsión de gastos y beneficios a la realidad.

El ex-presidente cobraba el 1 % de los ingresos presupuestados y en varias juntas fue acusado por parte de varios accionistas de haber inflado los números, puesto que después nunca se correspondían con lo ejecutado.

Directiva sin sueldo

El sueldo del presidente y los consejeros pasarán a ser historia después de la próxima junta, puesto que Tino Fernández pedirá el voto a los accionistas para cambiar el artículo 30 de los estatutos de la sociedad, eliminando la retribución del órgano de gobierno.

La redacción propuesta dice: «El cargo de administrador será gratuito, no percibiendo los administradores retribución alguna y no estando sujetos a dedicación exclusiva alguna durante el desempeño de su cargo. En consecuencia, los administradores podrán dedicarse a cualesquiera actividades públicas o privadas, únicamente con las restricciones previstas legalmente en cuanto a supuestos de prohibición e incompatibilidad».