Buen debut de Sidnei, Juanfran y Postiga, que añaden competitividad a la platilla
17 sep 2014 . Actualizado a las 18:25 h.«Necesitaba agitar la plantilla». Víctor Fernández dio un golpe en la mesa contra el Eibar con seis novedades en el once, entre las que se incluyeron tres de los últimos futbolistas en llegar a Riazor. Sidnei, Juanfran y Postiga se destacaron entre los mejores sobre el césped de Ipurúa y abanderaron la versión más práctica de este nuevo Dépor. Entre los nuevos solo Diakité, quien se había reconocido públicamente un paso por detrás de sus compañeros en el plano físico, esperó en el banquillo una próxima oportunidad. Quizá llegue el sábado (16.00 horas, Canal+ Liga y GolT) en Riazor contra el Madrid, aunque el éxito del dúo formado por Lopo y Sidnei (portería a cero por primera vez en la temporada y sin ocasiones claras del rival) augura continuidad en una de las zonas más sensibles del equipo.
En declaraciones a La Voz, los entrenadores José Luis Ribera y Tito Ramallo coinciden en sus análisis de los nuevos. A Sidnei se le ajustó el partido como anillo al dedo: de contacto, duro y cerrado. «Solo me queda la duda de verlo en mayor dificultad», afirmó Ramallo, exentrenador del Fabril y que fue miembro de la secretaría técnica del club. Juanfran corrió la banda y ofreció desborde hasta que se quedó sin fuerzas. De sus botas salió el centro del gol. «Es un jugador intermitente, pero participó mucho en ataque», afirmó Ribera, segundo técnico del equipo durante cuatro temporadas. Y ambos se deshicieron en elogios con Postiga, incansable hasta el pitido final. «La acción que define su partido llegó en el minuto 90. Debía estar cansadísimo, pero corrió a apretar en la salida del balón del Eibar», recuerda Ribera.
SIDNEI
Hizo un buen trabajo y demostró poderío . A Ramallo aún le quedaron dudas sobre el rendimiento de Sidnei: «Estuvo bien y correcto. Me gustó, pero todavía no me llenó por completo. El partido se ajustaba a sus características: dominó el fútbol aéreo, defendió en un espacio limitado y siempre jugó arropado. Demostró poderío y contundencia, pero hay que verlo con el equipo volcado y llevando la iniciativa, con más metros a su alrededor, más solo. Me queda la duda de verlo en mayor dificultad». Ribera, histórico central del Superdépor, destacó la sociedad del brasileño con Lopo: «Lo acompañó bien. Lopo fue la referencia, pero los dos se acoplaron a las características del otro y se compenetraron bastante bien. También ayudó bastante a Luisinho en las coberturas», destacó. Incluso se le vio chocar con Albentosa, cuando el central del Eibar acabó el partido como delantero. «El partido fue el más adecuado a sus características, muchos centros al área, los centrales muy arropados y eso facilitó su trabajo», añadió.
JUANFRAN
Desborde y velocidad mientras le duró el físico . El gol del Dépor llevó el sello de Juanfran, todo velocidad y buen toque en el centro. «Dio desborde en el uno contra uno. En general se le vio con chispa en ataque y participó más que Cavaleiro en la otra banda. Fue más incisivo, se le ven buenas maneras. No pareció su primer partido, aunque decayó al final, pero es que el Eibar le exigió mucho y él trabajó mucho», insistió Ribera antes de que Tito Ramallo confirmase: «Ofensivamente en la primera parte fue de lo mejor del Dépor. Practicó el desborde, nunca se arrugó, solo cuando se le vio que estaba cansado, porque en la segunda solo desbordó una vez».
POSTIGA
El primer defensor y una referencia en ataque . En opinión de los técnicos, a Postiga únicamente le faltó el gol para coronar su gran partido. «Trabajó muchísimo, aunque no era el día más adecuado para sus características. Tuvo que pelear ante centrales muy grandes y con poco espacio -subrayó Ramallo-. Además, fue el primer defensor y su trabajo lo agradeció el resto del equipo». «Es que -continuó Ribera- me agradó mucho su capacidad de trabajo, porque quizá le pudiera parecer un partido feo para jugar, pero estuvo metido hasta el final. Le dio mucho a sus compañeros, porque cada vez que el equipo se atascaba o el Eibar apretaba le buscaban a él y él aguantaba, soportaba el balón de espaldas, buscaba la falta o se giraba». Con la etiqueta de delantero rematador, el internacional portugués se retiró a los vestuarios sin un solo disparo entre los tres palos. «Pero es que el Dépor apenas atacó. Claro que le podemos pedir más a Postiga, pero tuvo mucha presencia», respondió Ramallo. «No hay que olvidar quién es. Era su debut y podía haber jugado más de referencia y no trabajar tanto, pero entendió a la perfección el tipo de juego que necesitaba su equipo y le dio muchísimo», añadió Ribera.