Un Deportivo nuevo derrota al Málaga en la noche de Reyes

Francisco Balado Fontenla
Fran Balado LA VOZ

TORRE DE MARATHÓN

CESAR QUIAN

Paciência debuta con victoria; el conjunto blanquiazul primó la defensa aunque también disfrutó de ocasiones en ataque

07 ene 2013 . Actualizado a las 03:04 h.

El Deportivo ofreció una cara muy distinta a la de domingos pasados para imponerse al Málaga por la mínima en el estadio de Riazor. Un gol de Pizzi nacido de un fallo garrafal de Gámez decidió un partido vistoso.

Aranzubía, que regresó a la titularidad en el debut de Domingos Paciência en el banquillo herculino, se frotaba los ojos desde su portería. Coincidió con la víspera de Reyes, una noche proclive para las sorpresas. En apenas una semana el joven entrenador había transformado al equipo. El Dépor jugó ordenado, practicó un buen balance defensivo, Pizzi y Bruno Gama fueron más solidarios que nunca, y los tres centrocampistas titulares (Abel Aguilar, André Santos, que jugó más minutos que a lo largo de todo el curso, y Álex Bergantiños) se multiplicaron para ayudar en las zonas incendiadas y para realizar coberturas a sus compañeros descolocados. Un Dépor bien armado atrás. Incluso Evaldo se disfrazó de Baltasar para regalar 89 minutos y medio de tranquilidad a la sufrida afición.

Respecto a nombres, el único cambio sustancial que introdujo Paciência fue la entrada de André Santos por Valerón. En la pizarra también hubo novedades. El tradicional 4-2-3-1 de Oltra dio paso a un 4-5-1 en situaciones sin balón que se transformaba en un 4-3-3 cuando era el dueño del cuero. Pero el cambio más importante residió en el espíritu. El Dépor salió del vestuario convencido a construir la casa por los cimientos. Dispuesto a dejar a cero su portería.

Pudo y mereció adelantarse el Dépor en la primera mitad. Bruno Gama desperdició tres ocasiones, Pizzi estrelló un libre directo en el poste, Riki insistió con sus artes, la segunda línea se incorporó con peligro y lo intentó desde la distancia... pero bien la falta de puntería o las actuaciones de Caballero motivaron que Riazor no celebrara el ansiado gol antes del descanso. Enfrente, el Málaga. Un equipo maduro que, de la mano del caballero Pellegrini, demuestra buen trato de la pelota en los grandes escenarios europeos. Esta filosofía y la irrupción del talentoso Isco le ha llevado a clasificarse para los octavos de final del torneo de clubes por excelencia. Los andaluces, sorprendidos por el despliegue físico del rival en el primer acto, esperaban a que el cansancio pasase factura. No iba mal encaminado. Pero justo cuando el Dépor se estaba comenzando a apagar, Jesús Gámez falló de forma estrepitosa. Pizzi recogió el regalo, encaró a Demichelis, último zaguero, lo recortó dos veces y soltó un latigazo con su pierna izquierda que se coló en el marco malaguista.

La segunda mitad del Dépor fue menos intensa, pero Aranzubía tampoco tuvo mucho trabajo. Los blanquiazules solo sufrieron en el último cuarto de hora, pero la disciplina defensiva y el buen posicionamiento dieron sus frutos y los tres puntos se quedaron en A Coruña.

Ficha técnica:

1 - Deportivo de La Coruña: Aranzubia; Manuel Pablo, Marchena, Zé Castro, Evaldo; Álex Bergantiños, Abel Aguilar; Bruno Gama (Aythami, min.90), André Santos (Camuñas, min.84), Pizzi; y Riki (Nélson Oliveira, min.68).

0 - Málaga: Willy Caballero; Jesús Gámez, Demichelis, Weligton, Monreal (Saviola, min.63); Camacho, Portillo (Iturra, min.46); Joaquín (Buonanotte, min.73), Isco, Eliseu; y Santa Cruz.

Gol: 1-0, min.57: Pizzi.

Árbitro: Fernando Teixeira Vitienes, del colegio cántabro. Mostró amarilla a Abel Aguilar (min.19), André Santos (min.47+), Bruno Gama (min.60) y Camuñas (min.87), por parte del Deportivo; y a Jesús Gámez (min.31), Weligton (min.36) y Monreal (min.48) por parte del Málaga.

Incidencias: Encuentro correspondiente a la decimoctava jornada del campeonato de Liga disputado en el estadio municipal de Riazor ante unos 25.000 espectadores.