Con Luis Enrique, la misma selección de Lopetegui

Luis César Sampedro

DEPORTES

Morell | EFE

11 sep 2018 . Actualizado a las 23:04 h.

Seamos sinceros, por ahora, no veo nada diferente en la España de Luis Enrique respecto a la de Lopetegui, aquella que arrolló en la fase de clasificación del Mundial. Luego la selección de Hierro en Rusia fue otra historia: pagó sus errores, cada vez que concedía algo, se veía en problemas y aquello acabó como todos sabemos. A este nuevo combinado nacional no le penalizó cada fallo, y eso ayuda.

Hubo dos mitades en la primera parte. En la inicial, España comete los errores suficientes como para poner en peligro el resultado, pero esas lagunas no coincidieron con la puntería del rival; luego le devolvió en cambio la moneda a Croacia, que cometió los mismos fallos que podían poner en pelgiro el partido y España sí aprovechó.

Hubo pegada, pero poco juego de España en un primer momento. Luego, sí, a partir del 2-0. y la contundencia de Asensio resolvió el partido. Y la segunda parte sobró. Todos los análisis que podamos hacer de lo que sucedió en ese tramo del partido son en cierto modo banales.

El 6-0 tiene mérito porque marcar seis goles siempre es complicado, y España tenía enfrente al subcampeón del último Mundial. Se le va a dar un valor importante a la victoria, pero hay que tener en cuenta su contexto y sus matices. Pese a la goleada, la selección mostró dudas, errores muy importantes que en un Mundial podían haber significado el 0-1, pero esta vez le pasó al revés.

Creo que dos partidos son pocos para emitir un diagnóstico sobre la selección de Luis Enrique. El análisis está muy condicionado por lo que vimos en estos dos partidos concretos. La diferencia real entre España y Croacia no es de 0-6, y España ganó en Wembley un partido que pudo empatar. Cuenta la selección con grandísimos jugadores en todas las líneas, y será una potencia con Del Bosque, con Lopetegui y con Luis Enrique. Luego un resultado te castiga. No siempre gana el Mundial el mejor, sino el más acertado en las cuatro semanas de campeonato. Ganó Grecia la Eurocopa de Portugal sin serlo.