El club de O Roxo jugará desde este fin de semana su duodécima fase de ascenso a Segunda División B, la octava en los últimos nueve años
15 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.El Cerceda merece un premio a tanta insistencia. El club de O Roxo jugará desde este fin de semana su duodécima fase de ascenso a Segunda División B, la octava en los últimos nueve años. Y lo hace después de un año irregular, con fases brillantes y otras menos lúcidas, en el que incluso hubo un cambio de entrenador (José Luis Lemos relevó a Ángel Cuéllar).
En los últimos veinte años, el Cerceda ha ganado cuatro títulos de Tercera y además ha cosechado dos subcampeonatos. Un palmarés repleto de laureles que arrancó en la campaña 1995/1996, cuando el cuadro rojiblanco ganó la liga regular con solvencia y llegó a la última jornada de la liguilla de ascenso como líder destacado. Al cuadro rojiblanco le valía con puntuar en Bembibre ante un rival que solo había sumado un punto en cinco jornadas. Y cayó goleado de forma sorprendente por 5-0, regalándole el ascenso al Oviedo B.
En esta ocasión, el Cerceda finalizó la liga regular en la tercera plaza, con un nombre destacando por encima del resto. El delantero lucense Uxío da Pena finalizó como pichichi de la liga con 27 goles. Junto a él, otros grandes nombres para la categoría como Álex Ares, Javi Otero, Marcos Valín, Cañi, Adrián Martínez, Edu o Agulló. Además, esta campaña ha dado un paso adelante un futbolista talentoso como Diego Uzal para ser uno de los que más minutos ha jugado.
Otro nombre destacado es el veterano Noé López. El lateral derecho fisterrán se rompió en septiembre el tendón de Aquiles y ha vuelto a jugar recientemente. A punto de cumplir cuarenta años, Noé jugará su undécima promoción de ascenso con el Cerceda. En la última, la jugada el pasado año, los rojiblancos quedaron eliminados en la última aciaga eliminatoria contra el Atlético Sanluqueño.
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