Campeón en Madrid, favorito en París

Manuel Sánchez MADRID / COLPISA

DEPORTES

SUSANA VERA | REUTERS

El balear se impone al prometedor Thiem para firmar su «repóker» en el Máster 1000 de la capital

15 may 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Rafa Nadal continúa empeñado en demostrar que aún le queda cuerda para rato. El balear consiguió su quinto título en el Mutua Madrid Open al derrotar al austríaco Dominic Thiem por 7-6 (8) y 6-3 en una batalla de dos horas y 20 minutos. Nadal comenzó su octava final en el Masters 1000 de la capital más nervioso que de costumbre, sin parecerse en nada a la apisonadora que había pasado por encima de Novak Djokovic en semifinales.

El manacorense aguantó su primer servicio gracias a los errores de su rival. Thiem le respondió con firmeza al saque tras cuatro errores no forzados de Nadal. En el tercer juego, Nadal se enredó con su saque y apenas conectó un primer servicio. Demasiados segundos saques permitieron a Thiem meterse en la pista y conectar varias derechas -su mejor golpe por encima de su vistoso revés a una mano-, para arrebatarle el primer break a Nadal. Aguantó su saque el finalista de Barcelona y se colocó 3-1 en el marcador.

La táctica de Nadal, muy parecida a la que suele utilizar contra Roger Federer, se basó en bolas altas al revés a una mano de Thiem. En ocasiones al austríaco prácticamente le hacía falta una escalera para alcanzar las bolas liftadas del balear. Esto le obligaba a jugar muy atrás y Nadal lo aprovechó durante todo el partido para cortar el ritmo con precisas dejadas. Thiem no estaba cómodo en la red y lo confirmó con una volea defectuosa que devolvió la rotura a Nadal: 3-3 en el marcador. Ambos mantuvieron sus servicios hasta el crucial décimo juego, donde con 5-4 para Nadal, Thiem salvó un 0-40 (tres bolas de set) a merced de tres saques imponentes y derechas perfectas. El primer set se decidiría en el tie break. Un desempate de vértigo en el que Nadal tuvo que salvar dos bolas de set (gracias a una caña y otra con una derecha paralela a la línea) para, a su quinta pelota, cerrar una manga espléndida.

Segundo juego

En el primer juego del segundo set, Nadal rompió su saque tras un largo intercambio en el que el austríaco cedió por desgaste. Todo fue sobre ruedas para el español. Thiem, apático y sabiendo que su oportunidad estuvo en ese primer set, se dejó llevar, y no mostró el nivel de la primera manga. Nadal, con viento a favor, aceleró al saque y, pese a provocar algún susto cuando tuvo que salvar cuatros puntos de rotura al sacar para partido, cerró la final, una de las más sentimentales para él de las disputadas en los últimos años.

Con este título, tercero del año tras Montecarlo y Barcelona, Nadal suma 72 en total (30 de categoría Masters 1000), y 52 de ellos sobre tierra batida. Además, esta victoria, la 380 de su vida sobre arcilla y la 840 en total, le coloca cuarto del ránking mundial y primero de la carrera a Londres. Números que mandan un mensaje: Nadal es el máximo favorito para Roland Garros y en cuestión de semanas irá a París a recuperar su trono.