El Dépor y la ley de los pequeños números

Toni Ardá TRIBUNA

DEPORTES

24 feb 2017 . Actualizado a las 05:00 h.

Si usted lanza una moneda al aire diez veces es muy probable que tenga la suerte de que salgan 7 u 8 caras, pero si tiene tiempo y la hace caer al suelo un millón de veces, con total seguridad obtendrá el mismo número de caras que de cruces, esa es la ley de los grandes números. Por desgracia, las victorias de un equipo se rigen por la ley de los pequeños números descrita por Kahneman -Nobel de Economía 2002-, ya que la media de goles en un partido no llega a tres debemos mirar alguna variable más para describir el rendimiento.

No me gusta hablar de la suerte, ni de la mala ni de la buena, prefiero hablar siempre de trabajar para tener esa ansiada suerte, pero desde luego nuestro Deportivo tiene un poco de esa mala suerte, escenificada en los pocos goles que ha materializado en relación a todo su torrente ofensivo.

Para no aburrir ni cansar al lector, voy a dar solo unos pocos datos. El Deportivo es el octavo equipo que más tiros realiza a puerta, más de la mitad desde dentro del área, que es desde donde se hacen la mayoría de los goles. Es el quinto conjunto que más centros al área realiza en jugada de ataque, otra de las formas habituales de crear ocasiones de gol. También es el octavo conjunto que más balones envía al área tras un saque de esquina. Y, además, se sitúa en la mitad de la tabla en faltas enviadas a la zona de finalización.

A pesar de todo, se encuentra en la posición decimocuarta de goles realizados y clasificado en el puesto 16 en lo que a puntuación, que finalmente es lo que vale, se refiere. El equipo desarrolla el juego y crea las ocasiones para que el balón se aloje en la red y por lo tanto para ganar partidos. Sucedió contra el Alavés, en donde fue manifiestamente superior, pero el balón no entró. Ahí está el resumen de los grandes números y la suerte.