Los gallegos son los pilotos más destacados en kartcrós júnior
18 ene 2017 . Actualizado a las 05:00 h.La diferencia más significativa con sus mayores es que una centralita electrónica limita la potencia de sus kartcrós. La federación sortea y custodia esos limitadores cada carrera. Pero lo que no puede constreñir es el talento gallego que rige en el Campeonato de España júnior de autocrós. El kartcrós del futuro tiene un marcado acento gallego y La Voz reunió a sus promesas más firmes.
Laura Lista (Arteixo, 2002), Diego Varela (Ferrol, 2001), Jorge Roel (Culleredo, 2000), Darío Calviño (Culleredo, 2000), y Alberto Lorenzo (Carballo, 2000) forman el núcleo duro de una parrilla de salida que el año pasado contó con cinco gallegos, tres catalanes, dos madrileños, dos cántabros y un riojano. Óscar Palomo relevó a Darío Calviño, que esta temporada dará el salto a la categoría absoluta.
Laura, hija del campeón Jacinto Lista, debutó directamente en el autocrós con 13 años. Correrá todo el Nacional. Darío, hijo del campeón Perfecto Calviño, fue dando pasos en el automovilismo desde los 12 años bajo la promesa de aprobar en sus estudios. Piloto de sangre caliente, ha firmado episodios memorables en el Nacional. Diego ha ido quemando todas las etapas desde los 3 años, cuando aprendió a conducir un kart. Junto a su padre, es el precursor de la categoría en Galicia. Jorge es primo y colaborador del campeón Iván Ares. Debutó el año pasado y seguirá el Nacional. Alberto debutó en karting (es campeón gallego) y kartcrós en el 2014 y en 2016 sumó puntos para ser tercero.
Galicia es referencia absoluta nacional y su potencial está cimentado en una cantera que también marca el ritmo en España. El autocrós es una de las disciplinas con mayor arraigo, afición y mejor palmarés en el noroeste de la península en todas sus modalidades. El Campeonato Gallego es la competición más relevante de España y muchos pilotos foráneos acuden a él para mejorar su nivel, lo que arrastra a los canteranos patrios a igualarse en la excelencia.
Varios factores contribuyen a ello. Debido al arraigo, muchos jóvenes pilotos proceden de familias vinculadas al automovilismo. Por otra aparte, la amplia oferta (y calidad) de circuitos de autocrós que existen en Galicia, frente a las carencias que sufren las modalidades de velocidad en asfalto. El José Ramón Losada de Morás establece año tras año hitos como el de reunir a diez mil espectadores en sus gradas. Además, los propios pilotos se sienten atraídos por una disciplina que es divertida para ellos porque abunda el derrape y permite improvisar algo la trazada, aunque hay que tener buena mano.
En el otro plato de la balanza, la financiación, principalmente sostenida por familiares y amistades en el caso de las categorías de menores. El karting es el ejemplo más claro, aunque para acudir al Campeonato de España es necesario disponer de decenas de miles de euros y el autocrós brinda una participación asumible por unos diez mil euros. Además, competitivamente, la categoría júnior es igualada y el certamen tiene una organización aceptable.
El Campeonato de España de autocross tendrá ocho carreras este año (seis confirmadas, una como preinspección y otra pendiente de aprobar): Motorland Aragón, Alcañiz, el 11 y 12 de marzo; Esplús, Aragón, preinspección, el 8 y 9 de abril; Ciutat Lleida, el 22 y 23 de abril; Castelo Branco, Portugal, el 6 y 7 de mayo; Ara Lleida, Mollerusa, el 3 y 4 de junio; Carballo, el 1 y 2 de julio; Arteixo, el 12 y 13 de agosto, y Miranda de Ebro, probablemente en septiembre.
La senda familiar que guía desde los karts hasta los ralis de asfalto
Muchos de los pilotos del futuro transitan por el camino de la lógica en el automovilismo, cosechando éxitos en sus inicios en el karting y mejorando sus habilidades en el autocrós antes de dar el salto a los ralis de asfalto (o al Nacional de tierra, el que se lo proponga). Y en esa ruta, los gallegos son los más rápidos. Conviene no olvidar los siguientes nombres, porque esto es lo que esperan de sí mismos:
Laura Lista
Será copiloto de su padre. «Me gusta la sensación de superación. El kartcrós es para coger mano. Haré lo que diga mi padre, pero ya estoy preparándome para ser su copiloto en cuanto cumpla 16 años», avanza.
D. Calviño
Bravura galaica. «El karting es la base del automovilismo, aunque requiere mucho entrenamiento y disponibilidad. Compaginar con los ralis es la meta final lógica. Me gusta el paso por curva en el autocrós. Los pilotos gallegos son bravos», afirma.
Jorge Roel
Iván Ares como ejemplo. «Galicia tiene más nivel que el resto. Esta categoría te enseña automovilismo. Animo a que la gente lo practique. Iván Ares es mi ejemplo a seguir», explica.
D. Varela
Talento al volante. «Galicia es el mejor lugar para el autocrós. Lo mejor, apurar la frenada, ir de lado, la superficie de tierra y las sensaciones del cambio de marchas. El piloto gallego es más fino, delicado y hace correr y traccionar más al coche», dice.
A. Lorenzo
Motivación. «Los gallegos son más valientes, se motiva más. En otras zonas se entrenan más, pero luego en carrera parece que es al revés», espeta.