El dispositivo para velar por la buena marcha del derbi se pondrá en marcha a las siete de la mañana
22 oct 2016 . Actualizado a las 05:00 h.Más de medio millar de efectivos velarán por la seguridad del derbi que Celta y Deportivo disputarán mañana a partir de las doce en el estadio de Balaídos. Así lo explican fuentes del dispositivo de seguridad que se ha puesto en marcha para el encuentro, declarado de alto riesgo por las características especiales que implica, esencialmente, una mayor afluencia de público y un horario distinto al habitual, ya que la previsión es que transcurra con total normalidad.
El número total de agentes de la Policía Nacional de Vigo y A Coruña que participarán en el operativo rondará los 250, a ellos se sumarán otros 225 de seguridad privada del club, medio centenar de miembros de Protección Civil y medidas de seguridad aéreas. Todos ellos serán los encargados de supervisar la buena marcha de un evento cuyo dispositivo se pondrá en marcha a las siete de la mañana, es decir, cinco horas antes de la hora de comienzo del encuentro, como es habitual.
Los hinchas del Deportivo, que rondarán los 900, se ubicarán en la zona visitante reservada en Río Alto y también en una parte en la esquina de Río Bajo que será habilitada para la ocasión. Desde el operativo de seguridad destacaron la gran disposición del club herculino a la hora de facilitar toda la información, subrayando que este había sido el partido más fácil de organizar en mucho tiempo.
Como novedad, al estrenarse en Liga los nuevos vestuarios del estadio, ubicados bajo la grada de Tribuna, que continúa en obras, los autobuses de los equipos entrarán por la calle posterior a dicha grada, lo que implicará un sistema de cierre temporal de la calle similar al que se lleva a cabo en el Santiago Bernabéu cuando juega el Real Madrid. De esa forma los equipos podrán acceder de forma totalmente segura al estadio céltico.
Los seguidores visitantes
En cuanto a la afición visitante, desde A Coruña saldrán siete autobuses en medio de un estricto control policial. Está previsto que partan desde el estadio de Riazor a las 9 de la mañana para llegar a Vigo en torno a las 11, cuando ya estén abiertas las puertas del estadio. El objetivo es que los aficionados no tengan que esperar en los alrededores del campo y puedan acceder directamente al recinto, donde es más fácil el control por parte de las fuerzas de seguridad.
Uno de los buses llevará a miembros del grupo ultra Riazor Blues. El convoy se encontrará por el camino con otro vehículo procedente de Verín, que también pasará por Ourense a recoger más hinchas deportivistas. En total, se espera que haya más de 800 aficionados blanquiazules en el estadio de Balaídos. El operativo policial estará compuesto por alrededor de 80 efectivos, con un grupo de miembros de la UIP destacados en A Coruña que acompañarán a la expedición que salga de Riazor.