La mañana en que Borja Valle se vistió de improvisado lateral derecho

p. b. A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

GONZALO BARRAL

Con el lateral derecho vacante, en la primera sesión semanal el técnico del Dépor sorprendió cuando situó al atacante en la defensa durante el partidillo con que terminó la práctica

19 oct 2016 . Actualizado a las 12:40 h.

Si hay un deportivista trabajador y obediente, ese es Borja Valle, quien se ha convertido en el multiusos de Garitano. Con el lateral derecho vacante, en la primera sesión semanal el técnico del Dépor sorprendió cuando situó al atacante en la defensa durante el partidillo con que terminó la práctica. No es la primera vez que el joven futbolista, quien se estrena en la máxima categoría, participa en los entrenamientos a demanda de las necesidades del técnico. Así, fue habitual verlo en el lateral zurdo durante la baja de Navarro, o como delantero mientras Marlos o Babel pulían su estado de forma. En cualquier caso, ambas posiciones se revelan más cercanas a la que le llevó hasta la élite, el extremo zurdo, a banda cambiada, desde donde en las dos últimas campañas llegó a marcar quince goles con el Oviedo.

Ayer por la mañana, sin embargo, jugó en la otra esquina del campo. Garitano dividió a la plantilla, completada por los fabrilistas Fornos, Monsalve y Óscar Pinchi, en dos bandos. Mientras Juanfran aún se ejercitaba al margen y Laure rumiaba su expulsión del pasado sábado, el técnico debía cubrir un hueco en el lateral derecho, pero no se acordó ni de Bruno Gama (que actuó ahí en pretemporada), o de los citados Pinchi o Fornos, ni incorporó a Blas, el habitual lateral del filial. Prefirió echar mano de su comodín. Valle formó así en defensa junto a Albentosa, Fornos y Luisinho.

Su polivalencia no solo lució en los ensayos, sino también en Liga. Jugó sus primeros minutos durante la segunda jornada contra el Betis, cuando participó como delantero centro y hasta disfrutó de una clara ocasión para marcar. Luego sustituyó a Joselu contra el Athletic y a Marlos frente al Alavés, cuando se le volvió a ver en el frente de ataque.

El cambio de rol llegó contra el Leganés, cuando Garitano echó mano de sus ganas en los instantes finales para refrescar la banda. Pero no actuó como atacante, sino de carrilero, con toda la izquierda para morder igual en defensa que mientras alcanzaba la línea de fondo. El estreno como titular llegó en el estadio Calderón, cuando ofreció trabajo y velocidad desde la banda izquierda, pero más atento a las subidas de Juanfran que a aparecer en ataque. Ahora, a la espera de que Juanfran se reincorpore a la preparación del derbi, Borja Valle volvió a acudir al rescate.