Un millón de euros, el ahorro de suministrar réplicas en vez de oficiales
31 ago 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El fútbol de Segunda B y Tercera División está en pie de guerra ante lo que consideran la burla de jugar con un balón como el que les ha dado la Federación Española (RFEF). La repulsa es unánime y así lo manifestaron ayer representantes de numerosos equipos a La Voz. Pero, ¿por qué se ha llegado a esta situación? ¿Hay partidas defectuosas? ¿Los Adidas Errejota dados a los clubes son réplicas y no oficiales como los que se han usado en los Juegos Olímpicos y en el Mundial de clubes. La solución que da la Federación es que los clubes envíen sus balones defectuosos y se los cambian por otros.
¿Cuál es el origen del Adidas Errejota?
Se trata de un balón relativamente nuevo y con pedigrí. Adidas lo lanzó para ser el balón oficial de las principales competicionales internacionales del 2016 y de hecho así ha sido tanto en el Mundial de clubes como en los Juegos Olímpicos. Se creó para homenajear a esta última cita y de hecho su nombre, Errejota, es el deletreo de las iniciales de Río de Janeiro. Además usa los tonos verdes y amarillos de la canarinha.
¿Por qué tienen problemas los equipos de Segunda B y Tercera?
Como sucede en todos los productos de las principales marcas deportivas; existen los balones oficiales y luego las réplicas. Y en el mundo del fútbol se sospecha que la Federación ha suministrado a los clubes esta versión «low cost». Así lo manifestaron públicamente técnicos como José Manuel Aira. Según fuentes consultadas por La Voz, en la Federación piensan que además podría haber salido de una partida defectuosa. Todo esto explicaría que el Errejota no haya dado problemas en los torneos de élite y sí lo esté dando ahora en las competiciones RFEF.
¿Por qué la Federación no ofrecería los balones Top a los clubes modestos?
Por un tema de ahorro. Uno de los compromisos que la RFEF tiene adquiridos con los clubes de sus competiciones es que subvenciona 30 balones a cada equipo de Segunda B y Tercera División. Es decir, hablaríamos de más de 400 equipos, más de 12.000 esféricos comprados a Adidas para su reparto. El balón top costaría en torno a 125 euros y la réplica 35. La diferencia es pagar más de un millón y medio de euros o 420.000.
¿Ha pasado esto antes?
Protestas por el balón siempre va a haber, porque ligeros cambios en el peso hacen que para unos sea una piedra y para otros un balón de playa. Pero un revuelo tan grande nunca había ocurrido porque lo que se demanda ahora es un tema de calidad. Hace unos años los clubes devolvieron masivamente balones a la Federación y esta a Adidas porque hubo una partida defectuosa relacionada con las válvulas. Pero el problema no era tan escandalosos. A las pelotas les costaba retener aire. No explotaban.