El evento arranca el viernes y tiene su cénit en la tarde del domingo
27 jul 2016 . Actualizado a las 04:00 h.El centro hípico de Casas Novas situado en Larín (Arteixo) ha iniciado la cuenta atrás para el arranque de su Concurso de Saltos Internacional, que como cada año se celebra el último fin de semana de julio. Una prueba, catalogada como de 4 estrellas, que repartirá 263.000 euros en premios a lo largo de sus nueve pruebas. Las más importantes serán el Trofeo Longines (62.000), en la tarde del sábado (17.30); y el Gran Premio CaixaBanka-Trofeo Tyko, en el cierre del domingo (16.45).
Pero que todo salga a la perfección en una competición internacional como esta es el resultado de un arduo trabajo. En Arteixo son unas 120 personas las que harán posible que los participantes y el público disfruten de un espectáculo que puntúa para el ránking internacional.
La experiencia de 16 años de concursos actúa como engranaje perfecto para una labor que aglutina desde el procedimiento administrativo de inscripciones y órdenes de salida hasta el control de un óptimo estado de la pista de competición en cada momento. El equipo de pista lo compone una veintena de personas, al igual que el de jueces y oficiales de las pruebas y los encargados de seguridad. Otro grupo numeroso es el responsable de los servicios de cátering y restauración (30 personas) y el de protocolo y apuestas (15). Además, están los chóferes y el grupo que se encargará de las actividades de animación infantil. Un complejo entramado para llevar adelante un evento que aglutina a una media de entre 3.000 y 5.000 visitantes, con el pico de afluencia el domingo en la prueba estrella, en esta edición el Gran Premio CaixaBank. Un aliciente para el público serán, nuevamente, las apuestas, cuyos beneficios serán donados a la Cocina Económica.
Uno de los trabajos con incidencia más directa en el momento decisivo de las pruebas es el de los oficiales, entre los que están los comisarios, jefes de pista y el jurado. El presidente del jurado Enrique Rey, destaca el proceso de «profesionalización» que está experimentando esta figura en la hípica, más cuanto mayor es su nivel. «Estamos ante concursos con premios importantes, donde no nos podemos permitir errores».