Los dos clubes uruguayos aseguran que no disputarán el torneo contra Celta y Deportivo si el gobierno no garantiza presencia policial dentro del estadio
14 jul 2016 . Actualizado a las 05:00 h.El cuadrangular en el que participarán Celta y Deportivo en Uruguay entre los días 21 y 23 está rodeado de polémica en el país anfitrión. Los equipos uruguayos participantes, el Nacional y el Peñarol, han amenazado en los últimos días con no disputarlo si el Ministerio del Interior no garantiza la presencia de policía en el interior del recinto deportivo que acogerá la cita. Desde el gobierno se asegura que se trata de un espectáculo deportivo privado y que son los clubes los que se tienen que responsabilizar, aunque hoy mantendrán una nueva reunión en la que se espera que se puedan acercar posturas.
El procedimiento habitual en los partidos de liga regular en Uruguay es que la policía se limite a controlar los accesos al estadio y permanezca fuera, mientras que dentro únicamente hay personal de seguridad privada. Este método, con guardias que no tienen potestad para expulsar a aficionados del estadio, no ha dado buenos resultados durante la última temporada. Tanto en el enfrentamiento entre estos mismos dos equipos como en otros partidos trascendentales de la competición hubo incidentes e incluso invasión de campo descontrolada.
Los clubes no quieren asumir riesgos. Disturbios como los que ya se han producido en el país -donde además no existe una normativa contundente contra los infractores-, unidos a lo visto en la Eurocopa, han aumentado la sensibilidad y el temor respecto a este problema. La principal baza con la que juegan las entidades es que el cuadrangular está generando gran expectación y saben que se va a ver más allá de las fronteras de Uruguay, por lo que quieren transmitir una imagen positiva.
Representantes de Nacional y Peñarol se reunieron el lunes con la comisión de seguridad de la Asociación Uruguaya de Fútbol (AUF) y el Consejo Ejecutivo para informarse de los pasos que ha dado la AUF con el gobierno. Ese mismo día remitieron una carta pidiendo que se les dé el «marco de seguridad necesario para que se pueda disputar el encuentro con tranquilidad».
«No somos empresas de seguridad ni encargados del orden público, hay cosas que trascienden a nuestra jurisdicción», declaró el responsable de seguridad del Peñarol a medios uruguayos. Además, su preocupación va más allá y se extrapola a la próxima liga. Esperan conseguir la colaboración del gobierno para este cuadrangular y que tenga continuidad en el campeonato.
Plan de la gira
Los equipos gallegos se medirán entre sí en Montevideo el 21 de julio a las 22.30, hora española en el Estadio Centenario de Montevideo, que previamente acogerá el clásico uruguayo que abrirá el torneo. La final será dos días después, el 23 de julio, en el mismo horario, mientras que el duelo por el tercer y el cuarto puesto ha quedado fijado para las 20.00 horas de ese mismo día.
Deportivo y Celta tienen previsto viajar a Uruguay el lunes 18 para afrontar estos compromisos, que se enmarcan dentro de la iniciativa LaLiga World, cuyo objetivo es potenciar la proyección internacional de los clubes españoles. En el caso de los vigueses, retomarán los entrenamientos en A Madroa el día 25 antes de partir hacia Italia, donde tendrán el stage.