El Compos cierra la temporada del descenso con una victoria en Aranda

José Antonio del Cura ARANDA DE DUERO / ÁREA 11

DEPORTES

LOF

El conjunto santiagués se da un alivio menor al conseguir por vez primera vez en la temporada dos victorias consecutivas

16 may 2016 . Actualizado a las 08:38 h.

Victoria por la mínima de la SD Compostela en Aranda de Duero. Los santiagueses consiguieron hacer buenos los tantos en propia meta de Sergio Noche, en el minuto 8 de la primera mitad, y de Bicho, en las postrimerías del encuentro, y certificaron en El Montecillo tres puntos que sirven de alivio menor al descenso. La Arandina por su parte volvió a caer derrotada en casa como ya hiciera hace quince días ante el Tudelano (0-3), pero con la salvación en el bolsillo, el mal fue menor. El Compos consiguió así por primera vez esta temporada dos victorias seguidas para despedirse de la categoría y bajar a Tercera.

Primera parte de aburrimiento y poca intensidad en El Montecillo. Ni Arandina ni Compostela se jugaban mucho y así parecieron traducir su juego sobre el césped del feudo ribereño. Tardaría de hecho casi diez minutos en verse cualquier acercamiento a alguna de las dos áreas, con la mala fortuna de que el primero en acertar, para la parroquia local, fue el equipo santiagués. Balón al costado derecho para que Mon controle y ponga un centro sobre la meta de Eladio. Sergio Noche, en su intento por despejar, terminaría introduciendo el esférico en las mallas blanquiazules para desazón arandina.

Tras el tanto, que pareció caer sin mayor pesar en la grada dada la salvación matemática de la Arandina, los de Javier Bermúdez parecieron querer recuperar el dominio de la pelota. Tocando por bajo con Ochoa y Adri, los ribereños se apoderaron de un control, que a diferencia de lo que hubiera sido previsto, no certificó en pegada; tampoco en llegada al arco rival.

De poca intensidad además, cualquier fallo parecía penalizar a intereses burgaleses. Y así estuvo a punto de suceder al rondar el minuto veinte de la primera mitad cuando, un balón al costado y recibido por Jordan, ponía en problemas a la Arandina. El disparo del jugador gallego lamía el larguero y sólo la estirada de un Eladio acertado, negaba el segundo de la tarde.

Pudo aún el Compostela aumentar la diferencia en el electrónico a la jugada siguiente. Pablo falla en la marca y el balón filtrado que deja solo a Chiño para que encare al meta madrileño de la Arandina. No tendrían suerte los compostelanos en esta ocasión; el ariete que no acertaba a controlar y de nuevo Eladio que aparecía para embozar el esférico.

Peligroso el Compos por fuera, la Arandina se limitaba a defenderse. Desaparecida de tres cuartos para arriba entonces, tan solo en un disparo lejano de Borja Plaza a una acción derivada de un saque de banda que se iba alto pareció sumar en cuanto al bagaje ofensivo local. Fue lo único destacable de los de Bermúdez en la primera mitad, pues al descanso, tras ese último escorzo, llegaban ambos equipos con la mínima para los

Tras la reanudación, cambio de campos, pero no de guión. El Compostela saldría más peleón que su rival y apenas transcurridos cinco minutos, los de Fredi que a punto estarían de certificar la sentencia con un nuevo tanto; el barullo en el área no sería aprovechado de primeras y posteriormente, en una nueva jugada de ataque, los santiagueses veían como se les invalidaba un tanto a Jordan por presumible fuera de juego.

Con eso y todo, la Arandina trataría de responder. Lo haría Ruba por banda en su enésima galopada, pero su balón, envenenado, terminaría por estrellarse en el poste y salir por línea de fondo. Mismo derrotero llevaría el siguiente ataque ribereño, aunque el final en este caso sería diferente. Nico filtra un balón a la espalda del tres gallego y Ruba, que esta vez sí que iba a llegar para poner el balón atrás. Allí aparecería entonces Fran Adeva quien, en segunda oleada, empujaría el balón a las mallas rivales para igualar la contienda.

La igualada devolvería el empuje a los locales. Tanto es así, que el propio Adeva estaría a punto de dar la vuelta al luminoso en un nuevo balón al segundo palo. Allí aparecería Marqueta para atrapar. Mejoraba la Arandina y se iba a por el partido, pero la sensación de fragilidad nunca terminó por desaparecer del todo. Por eso, con el partido ya muriendo, un balón magistral de Sánchez iba a aprovecharlo Bicho para ganar la espalda a la defensa y batir a Eladio por alto. Era el 1-2 y la imposibilidad de empatar para los ribereños, que veían como el crono se cerraba y el colegiado andaluz Alonso Portillo decretaba el final del partido.