A Coruña empieza a ser de ACB

I. Antelo A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

Paco Rodríguez

La ciudad respondió a la llamada del Leyma y guio al equipo naranja hacia la segunda victoria

14 may 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

La ciudad de A Coruña siempre responde en los grandes acontecimientos. Y ayer lo volvió a demostrar al llevar en volandas al Leyma, guiándolo hacia la segunda victoria de la serie de semifinales contra el Melilla. Hacía muchísimos años que no se vivía un ambiente de baloncesto similar en la ciudad, exceptuando claro está los encuentros que el Coliseo albergó de la selección española y de la pasada Copa del Rey. Riazor fue naranja y lo volverá a ser mañana (12,30 horas) en el partido que puede decidir que el Básquet Coruña acceda a la final por el ascenso a la Liga Endesa.

A Coruña empieza a demostrar que quiere ser de ACB. Más de cuatro mil personas se dieron cita en un pabellón entregado y casi repleto. Solo había plástico por cubrir en las esquinas de un recinto que rara vez se ha llenado en la era moderna. La afición del Leyma creó además un ambiente fabuloso, mágico, haciendo volar sus bufandas, cantando y vibrando con cada canasta y, en definitiva, jaleando a los suyos sin descanso y generando un ambiente espectacular. Riazor fue naranja e incluso hizo la ola en varias ocasiones, a pesar de que el juego fue menos fluido que en partidos anteriores. Sobre todo en el segundo y el tercer cuarto, en donde los jugadores de Tito Díaz parecían más atascados. En esos momentos el pabellón arrimó el hombro y confió en la victoria. Ni un solo reproche a los fallos en los tiros de un Monaghan que vivió su noche menos lucida en lo que va de play off de ascenso.

Los tres triples finales de Stelzer y los del propio Monaghan (metió el que valía, el que rompió el partido) y Burjanadze elevaron la euforia de una afición que quiere alargar su sueño. Las cuatro mil almas coruñesas se pusieron en pie para despedir a su equipo. Saben que mañana habrá que volver a sufrir y que no será fácil recuperar el nivel físico por la exigencia del rival; pero su aliento final servirá para que el Leyma empiece ganando el cuarto encuentro.

Así lo reconocía Tito Díaz al final del partido. «Conseguir que la gente venga es tan importante como ganar el partido. Riazor lleno, un público entregado, animando en los momento difíciles... Estoy encantado. No tengo palabras. Agradecidísimo. El baloncesto de A Coruña sigue dando pasos adelante y solo les pido que vengan el domingo porque el equipo va a intentar zumbar a otro grande. La ilusión puede con todo».

Había quien dudaba durante la semana de si el Leyma sería capaz de conseguir llenar Riazor. Y es que la Liga apenas la habían empezado 700 personas en la grada y solo en las jornadas finales se comenzó a respirar cierto ambientillo festivo (más de dos mil espectadores contra el Barcelona B y el Lleida). En la primera eliminatoria, contra el Breogán, el Palacio superó los 3.000 aficionados, pero con casi la mitad de asistentes provenían de Lugo.

De ahí que todos los estamentos del club apoyasen un llamamiento a la afición desde las redes sociales. Una campaña que además iba unida con una promoción de entradas baratas. «Más asequible que ir al cine», explicaba su presidente, Juan Carlos Fernández en la previa. Esto, unido al baloncesto espectáculo que está ofreciendo el equipo hizo que la ciudad se entregase en masa al proyecto naranja.

Incluso el primer equipo de fútbol de la ciudad, el Deportivo, quiso estar presente en el pabellón. Tanto el presidente Tino Fernández como el consejero Martín Pita y jugadores como Juanfran se acercaron al Palacio para aportar su granito de arena. En representación del ayuntamiento estuvo en concejal de cultura José Manuel Sande. Mañana, a las doce y media, otra oportunidad para demostrar que sueña en naranja.

Huesca supera al Burgos

En la otra semifinal del play off de ascenso, Huesca se impuso ayer al Burgos (83-71), con el que el conjunto oscense se adelanta en la eliminatoria (2-1) y podría certificar mañana el pase a la final.