La cenicienta se ahogó en la valentía

Miguel Álvarez SAQUE DE BANDA

DEPORTES

20 feb 2016 . Actualizado a las 05:00 h.

No hubo continuidad a los cuentos de hadas. El Fuenlabrada, la cenicienta de la eliminatoria contra el Real Madrid, murió de pie. Planteó el encuentro con valentía, pero dibujó un escenario ideal para los blancos. Los de Pablo Laso se mueven como pez en el agua cuando se trata de galopar y disparar. Y dieron el golpe casi definitivo -nunca mataron el choque- en el segundo cuarto. Enfrente, el Montakit se estrelló en cuarta marcha.

A pesar de que el Real Madrid accedió a semifinales de manera holgada, no despejó algunas dudas. Habrá que ver cómo responden los blancos en caso de que un adversario les plantee una batalla de mayor exigencia física. Poseen calidad a raudales y experiencia para lidiar en el infierno, pero también son víctimas de unas desconexiones que le dan oxígeno a cualquier rival.

El encuentro ante el Fuenlabrada propició para los campeones un buen banco de pruebas para sus tiradores. Pero, ¿qué sucederá si el coloso Ayón, dador de equilibrio, se ve despojado de su fuerza? ¿O si algún enemigo travieso plantea un duelo farragoso? La mejor noticia para los de Laso, además del nítido triunfo, fue que el técnico pudo dosificar a alguna de sus piezas clave. Un factor que refulge a medida que las eliminatorias de un torneo concentrado como la Copa quedan atrás. El Real Madrid porta con calma el cartel de favorito, pero deberá ajustar algunos aspectos en defensa para volverse menos vulnerable.