Crío en Múnich, fijo en As Somozas

Paulo Alonso Lois
paulo alonso lois FERROL / LA VOZ

DEPORTES

JOSÉ PARDO

El central, que viajó con el Dépor al mítico triunfo ante el Bayern en el 2002, manda en la zaga del modesto

12 feb 2016 . Actualizado a las 19:06 h.

No había cumplido aún los 21 años Antonio López Ameijenda cuando las bajas de cuatro centrales lo llevaron al Estadio Olímpico de Múnich en la convocatoria de Champions del Deportivo. Aunque no llegó a jugar ante el Bayern, vivió emocionado desde el banquillo el primer triunfo español en Alemania. Hoy, con 33 abriles, sigue en activo como jefe de la defensa del Somozas. Tan en forma, que no se perdió todavía ni un minuto de liga con el octavo clasificado, una de las revelaciones de la Segunda B después de 24 jornadas. «A veces todavía surge la historia de aquel partido dentro del vestuario, o le explico a los chavales como podía controlar tal balón Valerón. Tenía gestos técnicos peculiares que te marcan», reconoce Antonio, citado entonces por Jabo Irureta ante las ausencias de César, Andrade, Djorovic y Pablo Amo, en una de varias convocatorias con el primer equipo blanquiazul.

Antonio pasó cinco campañas en el Fabril e hizo una pretemporada con el Deportivo, pero no llegó a debutar en partido oficial en Primera. Tras pasar por el Cerceda, el Ourense y el Racing, recaló en julio en el Somozas.

Pocos en activo ya

Ganó aquel Dépor al Bayern de Kahn y Ballack por 2-3, con triplete de Mackay y venganza de Irureta, que enterró en el Olímpico su derrota con el Atlético en la final de la Copa de Europa de 1974. «Aprendí muchísimo, y también a nivel personal con la convivencia en un vestuario tan diferente a los que integré luego, con tantas costumbres distintas y también más egoísmo, claro», comenta uno de los pocos jugadores en activo de aquel viaje a Múnich. «Siguen Valerón, Manuel Pablo, Dani Mallo, Javi Angeriz, el otro chaval de aquella convocatoria y que ahora milita en el Cerceda...», recuerda.

Antonio lleva once jornadas con cuatro tarjetas, cuidándose de sumar una quinta que conllevaría un encuentro de sanción y el fin de su racha de 2.160 minutos en la presente liga de Segunda B.

Como varios compañeros, Antonio viaja a entrenar cada día en coche desde A Coruña a este pueblo de unos 1.200 habitantes, que repite campaña en Segunda B. Solo el Logroñés suma más puntos como visitante. «Aquí en nuestro campo, algo pequeño, los rivales no se abren y nos cuesta más», admite el central.

«No renunciaremos a nada» 

Con 36 puntos conseguidos y 14 partidos por delante, el Somozas ve a tres a Pontevedra, sexto y el primer equipo que se clasificaría para la próxima Copa del Rey, y a seis al cuarto, el Tudelano. «Mientras no consigamos los 45 que dan la permanencia, nos equivocaríamos si echásemos cuentas para otro objetivo. Pero si a falta de siete u ocho partidos estamos ahí, tampoco renunciaremos a nada», considera Antonio.