Del efecto placebo a la muerte súbita

Pablo Gómez Cundíns
pablo gómez REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

Juan Herrero | Efe

El médico deportivo Javier Pombo analiza los efectos y peligros de las sustancias más consumidas

13 nov 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

«Es un problema que nos preocupa». Son palabras del doctor Javier Pombo, traumatólogo deportivo, médico del deporte y durante años habilitado para realizar controles antidopaje. Una de las voces autorizadas más prestigiosas del ámbito médico deportivo de Galicia explica para La Voz las supuestas intenciones de los deportistas que adquieren estas sustancias y los riesgos que corren al consumirlas con algunos ejemplos de las más reclamadas en las farmacias.

Tónicos reconstituyentes

Su utilidad a nivel médico es completamente nula. ¿Qué busca el aficionado? «Asocia varios productos a una cierta utilidad, real o no y este es uno de los ejemplos más claros», explica Pombo. «Su utilidad a nivel médico es completamente nula y es más un placebo que otra cosa», añade. «Con estos multivitamínicos buscan no cansarse, un rendimiento mayor», añade. ¿Que logran? «Nada», espeta Pombo. ¿Qué riesgos corren? «El ginseng a la larga puede provocar hipotensión y alteraciones electrolíticas», explica.

Salbutamol

Uno de los más peligrosos. Vasoconstrictor y broncodilatador. «Con su consumo se persigue aguantar más tiempo corriendo sin que se produzca dificultad para respirar», asegura, mientras añade: «Se consigue ese efecto a corto plazo, en tanto dura la broncodilatación». Sin embargo, advierte: «Tiene un efecto rebote. El corazón bombea más y con más esfuerzo porque no notas esa sensación de fatiga y continúas con la exigencia máxima. Cansancio y dificultad respiratoria son advertencias naturales para reducir la intensidad del esfuerzo, pero esto no sucede al consumir salbutamol para correr una maratón. De la taquicardia se pasa en plena carrera a un riesgo máximo de infarto y muerte súbita».

Minerales

Magnesio, sobre todo. «Creen que evita los calambres y la realidad es que no hay evidencia de ello. Sin embargo, aunque el riesgo podría ser banal en principio, un exceso de minerales puede derivar en un cólico nefrítico. Por ejemplo, demasiado calcio puede originar litiasis renal o biliar (cálculos de riñón o de vesícula), o el aumento de creatinina puede acabar en un desequilibrio hidroelectrolítico», analiza Pombo. «Los minerales no se pueden tomar indiscriminadamente», zanja. «No está definido lo que persiguen con su consumo. Este tipo de deportistas acaba tomando lo que les diga cualquiera», critica.

Glucosas

Hipoglucemia y lipotimia. «Su consumo en exceso hace que se segregue insulina, que regula su nivel y puede rebajarlo en tal proporción que corren riesgo de hipoglucemia y lipotimia. En un ejercicio brusco a corto plazo puede derivar en cansancio, por el efecto rebote. Las bebidas azucaradas si además tienen gas, mucho peor», explica.

Conclusiones

Consumo indiscriminado de sustancias de todo tipo. Javier Pombo concluye que «la desinformación lleva a los deportistas a generarse estados de opinión con respecto a determinadas sustancias, siguiendo a ciegas los consejos de compañeros sin detenerse a pensar si realmente esas sustancias son efectivas o incluso si podrían ser dañinas para su organismo».