Una bajada infernal desde el monte Xalo, en la que los frenos llegan «casi agotados»

Iván Antelo A CORUÑA / LA VOZ

DEPORTES

Así ocurrió el accidente del rali de A Coruña

El accidente se produjo muy cerca de Carral, población que este fin de semana se encontraba en fiestas

06 sep 2015 . Actualizado a las 16:52 h.

El monte Xalo, lugar idílico para los amantes del deporte y la naturaleza situado entre los ayuntamientos de Carral, Culleredo, Cerceda y A Laracha, fue el testigo de excepción de la mayor tragedia que se recuerda en el automovilismo coruñés. De hecho, hacía 29 años del último atropello mortal, producido en Cambre en 1986, y que en su día acabara con la vida de un fotógrafo en el rali Leyma.

El siniestro, que acabó con la vida de seis personas y mantiene a más de una decena ingresada con heridas de diversa gravedad, se produjo concretamente a escasos metros del núcleo urbano de Carral. Muy cerca de la iglesia de San Esteban de Paleo. Uno de los lugares más masificados del rali de A Coruña, ya que se podía ir andando desde el pueblo, una localidad que además se encontraba en fiestas.

El tercer tramo

La vigésima edición del rali de A Coruña, Memorial Eulalio Mora, que volvía a disputarse catorce años después, estaba estructurado en tres tramos, por el que se pasaban tres veces cada uno de ellos. El del accidente era el último. Con una longitud de 17 kilómetros, con salida de la localidad cercedense de Encrobas, para luego bordear el lago de Meirama y subir hasta el Monte Xalo. El atropello se produjo en la parte final, en la bajada de vértigo que hay desde el merendero, cerca de la urbanización del Xalo, hasta las proximidades de Paleo. Testigos presenciales comentan que en esa zona «los pilotos realizan un descenso muy rápido, con lo que los frenos llegan al final casi agotados».

Choque contra un talud

Según fuentes cercanas a la organización, el fatal desenlace se produjo tras «una curva rápida de derechas, que habitualmente se coge en segunda o en tercera». Entonces, «se produjo un subviraje y los pilotos perdieron el control, chocando de morro contra un talud, en el que había espectadores situados». A partir de ahí, el coche volcó «dando vueltas de campana, llevándose por delante gente a su paso descontrolado», describen. Estas mismas fuentes apuntan que «los comisarios habían pasado antes» y «echaron a espectadores de aquella zona porque era peligrosa» pero «cuando se marcharon volvieron a colocarse».

Segunda pasada

El accidente se produjo además a una hora punta. A primera hora de la tarde, sobre las tres, los 140 pilotos inscritos ya habían pasado por este punto, pero la afluencia de público aumentó en la segunda pasada, que comenzó a producirse a partir de las siete de la tarde.

Cuando se produjo el fatal desenlace, cerca de las ocho, la cabeza de carrera ya se encontraba en Arteixo para comenzar el tercer bucle. Estaba previsto que el rali finalizase en torno a las diez y media o once de la noche. Sin embargo, casi al momento, la organización suspendió el rali que dominaba Iván Ares, seguido de Alberto Meira.

Piloto de la zona

El destino quiso además que el piloto del accidente conozca el lugar como pocos. Sergio Tabeayo Sande es precisamente de Carral y muy conocido en la zona porque, además de por su pasión por los ralis, jugó en el equipo de fútbol del pueblo. Su copiloto era Luis Miguel Prego Santos, natural de Cerceda, que disfrutaba de su primer campeonato gallego. Ambos salieron ilesos del siniestro, aunque se les vio muy afectados ante la tragedia ocurrida.