Florentino firma un esperpento

José M. Fernández PUNTO Y COMA

DEPORTES

01 sep 2015 . Actualizado a las 16:17 h.

El más difícil todavía. Una nueva pirueta de Florentino Pérez para cerrar su verano más esplendoroso, un par de meses en los que se ha superado a sí mismo. Tan habituado está el ególatra presidente blanco a las palmadas de su grupo de corifeos que este verano las ha reclamado hasta en tres ocasiones. La última, ayer, en un cierre de mercado esperpéntico. La palabra para incorporar al internacional español la había empeñado Florentino, el dinero lo pondría el Real Madrid. Así ha sido siempre. Una tradición que anunciaba un nuevo dispendio: con Casilla recién fichado y Keylor Navas, el Real Madrid estaba dispuesto a pagar 30 millones de euros y prescindir del portero al que el Bernabéu le expresó su apoyo el sábado pasado a cambio de un guardameta que finaliza contrato el próximo 30 de junio y cuya relación con su entrenador estaba lo suficientemente envenenada como para ser un digno candidato a descarte del mercado invernal. Un negocio redondo, para el Manchester United.

Destacan sus exégetas que el presidente blanco ha sido capaz de fichar a la estrella de su gran rival, de firmar a un Balón de Oro en una servilleta y de incorporar el último día de mercado a Ronaldo, Ramos, Modric o Bale. Al Madrid le ha salido a precio de oro cada capricho de un presidente solo empeñado en vender la imagen de un triunfador, precisamente en la única época en que su gran rival le ha superado en títulos e imagen. Ayer, el esperpento sustituyó al dispendio.

Pagar una fortuna por un jugador que él mismo se encargó de devaluar parecía el broche perfecto para un verano que comenzó con su indigna actuación en el adiós de Iker Casillas y que continúo con la claudicación ante un Sergio Ramos al que todavía le quedaban un par de años de contrato y que consiguió una ampliación con un generoso aumento de sus emolumentos. Florentino Pérez tiene una enorme facilidad para emponzoñar las negociaciones, pero se mueve con soltura en los temas financieros: él encarece los fichajes y paga el Madrid. Una tradición quebrada por un ridículo de época.