Intentará que se depuren responsabilidades ante la Justicia ordinaria
01 sep 2015 . Actualizado a las 05:00 h.El Club Ourense Baloncesto vuelve a dejar su planificación deportiva en un segundo plano para volcarse de nuevo en los litigios, una vez que la ACB confirmó ayer su decisión de desoír el dictamen del Consejo Superior de Deportes que debía culminar en la inscripción de los cobistas en la máxima categoría.
La reacción de los ourensanos no se ha hecho esperar y, de inmediato, esta misma mañana solicitarán el amparo del citado organismo nacional y la suspensión de la Liga ACB hasta que no se confirme su inclusión en el campeonato, como explicó el letrado de la entidad, Miguel Juane: «Haremos lo que ya le comunicamos a la ACB la pasada semana, si no estábamos inscritos el día 31, y pediremos amparo al CSD, que ordene la inscripción al mismo tiempo que suspenda inmediatamente la competición de la Liga ACB, mientras esto no suceda. También pediremos posteriormente ante el órgano competente las responsabilidades pertinentes y, además, la indemnización por daños y perjuicios que ahora mismo son muy importantes».
Y es que la propia asociación de clubes se muestra firme en su intención de mantener la postura del pasado 3 de julio, por la que se acordó denegar la solicitud de inscripción de los cobistas y declarar una plaza vacante. Para eso se aferran a motivaciones centradas en que COB continuaba en causa de disolución y han optado por confeccionar hoy mismo el calendario de emparejamientos de los dieciocho miembros de la Liga, incluyendo a los descendidos en la cancha la temporada pasada, Guipúzcoa y Fuenlabrada.
En ese sentido, el presidente del COB, Antonio Gavilanes, se muestra firme en la legitimidad para ocupar este mismo año una plaza en la élite del baloncesto estatal: «Parece claro que, aunque queramos reclamar nuestros derechos de forma tranquila, eso no surte efecto y aquí siempre gana o sale mejor parado quien más grita o protesta, por lo que si debemos hacer lo mismo, lo haremos. Entendemos que tenemos razón y también contamos detrás con una ciudad y una provincia que no merece el trato que se nos está dando, al igual que todos los componentes del club».
En la misma línea se ha movilizado la afición a través de las redes sociales, e incluso las instituciones, convencidas de que el equipo ourensano no está solo en una batalla en la que, de algún modo, se ha visto inmerso casi sin quererlo, porque el desafío de la ACB parece planteado de manera directa al propio Consejo Superior de Deportes, cuya resolución no ha sido acatada en primera instancia.
Mientras tanto, lo que tienen claro desde la asesoría jurídica que Miguel Juane brinda a los cobistas es que sus reivindicaciones tienen un sólido fundamento: «Deben darnos amparo de forma inmediata, porque es una desobediencia civil y va contra Derecho». De momento, la principal prioridad para la escuadra del Pazo, ya inmersa en su planificación deportiva, es que se ratifique cuanto antes la inscripción, pese a la negativa de los organizadores. Cada día que pasa juega en su contra, pero existe el convencimiento de que, a la postre, se confirmará en breve el ascenso ganado en la cancha.
Una vez confirmado ese paso, los rectores de la sociedad anónima deportiva también intentarán que se depuren responsabilidades ante la Justicia ordinaria.