Ramos mete el gol de su vida

Pablo Gómez Cundíns
Pablo Gómez REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

JUAN MEDINA | Reuters

El defensa sevillano cobrará 9 millones cada año hasta el 2020 y se obliga a ser un referente blanco

18 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

La nefasta gestión de vestuario que ejerce Florentino Pérez como presidente del Real Madrid en ocasiones lleva al club a callejones sin salida. El proceso de renovación de Sergio Ramos ha sido uno de ellos, y el central ha sabido aprovechar esta situación al máximo. Ayer firmó la ampliación de su contrato hasta el año 2020 (el futbolista tiene ahora 29 años de edad) a razón de nueve millones de euros por temporada. «No ha sido por dinero», dijo.

Pero lo cierto es que las conversaciones entre ambas partes fueron en un tono elevado y abundaron en el juego sucio, de manera que, al igual que la gestión de la situación de Iker Casillas y José Mourinho, lo que ha conseguido Florentino Pérez más que sacarse un problema de encima ha sido dividir al madridismo. Otra vez.

Sergio Ramos le ha ganado el pulso al presidente, aunque para un sector de los aficionados ha sido a costa de menoscabar su propia imagen. Ayer, el central quiso justificarse y reiteraba una y otra vez: «Sinceramente si fuese un tema económico no me hubiese quedado, en otro sitio podía haber ganado más dinero pero no es cuestión de dinero, había circunstancias personales que solucionar. Jamás he llamado a las oficinas para pedir una renovación ni aumento de sueldo. Nunca me ha movido el dinero, la felicidad de mi familia es prioridad».

Ramos deseó que el público del Bernabéu no le pase factura y anunció: «Mi cabeza y mi corazón siempre han estado aquí. voy a abanderar al equipo dando ilusiones». Y es que la ampliación de su contrato conlleva además de un ascenso en el escalafón salarial del vestuario, un aumento de responsabilidad, sobre todo tras la marcha de Casillas. El nuevo acuerdo contractual refuerza no solo el ego de Sergio Ramos sino su peso dentro de un vestuario compartido con otro futbolista líder de fuerte carácter y elevadísima remuneración: Cristiano Ronaldo.

Ramos sufrirá cierta presión añadida propia de su nuevo estatus y de la que no se libra, como ya ha quedado demostrado, ni el astro de Madeira.

Después de ciertas etapas de descontento del portugués, y las salidas de Mourinho y de Casillas, Florentino Pérez no podía permitirse otro episodio desestabilizador cuando la temporada ni ha empezado. El adiós de Iker certificó su derrota en este particular pulso con uno de sus propios capitanes y gran apuesta personal desde el año 2005.