La todavía asociación deportiva busca un marco en el que poder desarrollar una serie de iniciativas socioculturales paralelas para las que hoy no disponde de recursos
16 ago 2015 . Actualizado a las 05:00 h.«A realidade é que temos un torneo moi bonito, pero que está nun punto de tensión límite, recaendo o mesmo sobre a capacidade individual da xente que traballamos nel». De esta forma introduce el portavoz del Torneo Internacional Alevín Arousa Fútbol 7, Alberto Diz Reboredo, la problemática que ha llevado a los responsables de la que para algunos es una de las mejores citas del planeta para su categoría de edad a tomar la decisión de transformar en los próximos meses la asociación deportiva que hoy le sirve de paraguas organizativo en una fundación pública. Dos estructuras que comparten el denominador de la falta de ánimo de lucro, pero que nada tienen que ver ni a nivel legal, ni, lo que es más importante y mueve la operación en ciernes, a nivel de posibilidades de generación y gestión de recursos, captación de fondos y flexibilidad a la hora de albergar bajo el mismo cartel propuestas tan dispares como puedan ser un torneo de jóvenes futbolistas alevines procedentes de tres continentes, y módulos de enseñanza escolar desarrollados en paralelo desde las gradas del mismo.
Es esta última una idea que está ahí, propuesta, explica Diz, en la pasada edición por un educador «para o ano que vén, porque nos dixo que non coñece un contexto multicultural, con aspectos xeográficos e étnicos a nivel real como o que ofrece o noso torneo» ante la cantidad de plantillas procedentes de tantos países distintos en una comarca como la arousana.
Convenios y vías de financiación
Pero no es esta la única iniciativa al margen del fútbol. Así, desde la hoy todavía asociación deportiva, fórmula elegida hace un lustro por los responsables del AF7 para empezar a levantar también una cantera a imagen y semejanza de un club, se recuerda que hasta hace unos años «tiñamos un programa de cooperación co Centro Penitenciario A Lama que permitía a reclusos colaborar connosco os días do torneo, pero cambiou o director do centro, e ao novo non lle pareceu ben seguir. No corpo da organización temos integrados con funcións de responsabilidade a xente de BATA, pero non temos ningún acordo coa asociación. Os xaponeses querían coñecer o proceso do albariño, levámolos a unha adega, e botaron horas e horas alí, e saíron encantados. ¿Por que non imos poder regular ese tipo de accións co Consello Regulador de Rías Baixas?». Pues, se responde Diz, «porque «o torneo ten un crecemento constante, e medra por riba da capacidade das persoas que o organizan. Temos unha serie de accións aparelladas, unidas por unha idea común de integración, de convivencia e de multiculturalidade desde o deporte», pero, subrayan en el AF7, «hai melloras imposibles porque estamos ao 110 % da nosa capacidade organizativa», con tres persoas diseñando el marco del torneo, y unas 50 trabajando a pie en los días de su celebración.
Transformar la asociación deportiva AF7 en una fundación permitirá «liberar tensión; externalizar algún servizo, asinar convenios para regulamentar colaboracións como esas co centro penitenciario, con BATA ou co Consello Regulador». Y al mismo tiempo, atraer recursos que, quizá en un futuro, permitan ampliar a una semana esa mezcla soñada desde el AF7 de campeonato y evento sociocultural internacional, y desarrollar todas «esas ideas que temos, pero impensables por falta de recursos» dice Diz.
La Oficina de Patentes y Marcas tramita el modelo de recogepelotas vilagarciano
Cuando Alberto Diz habla de que «temos moitas ideas que se podían levar adiante, impensables por falta de recursos», más de uno podría pensar en que se trata simplemente del ejercicio de engreimiento de una asociación deportiva al frente de un gran torneo internacional de fútbol base. Pero ahí está la realidad para desmentirlo. Y es que en el Arousa Fútbol 7 han sobrepasado una nueva frontera, adentrándose en el I+D+I del equipamiento deportivo. Con un modelo de recogepelotas que de tan simple, parece increíble que nadie antes hubiese parado a pensar en él y, sobre todo, a sacarle su buen rendimiento económico.
A grosso modo, se trataría de una vara vertical anclada sobre el perímetro exterior del terreno de juego y coronada por una cesta sobre la que colocar el balón. Un soporte multiplicado por cuanta cifra sea necesaria alrededor del rectángulo reglamentario de modo que cuando el esférico empleado durante un partido salga fuera, el jugador atacante pueda disponer de un repuesto inmediato, sin depender del ángulo de salida, o tantas veces todavía más importante, de la buena fe de los recogepelotas humano.
Lo arriba descrito no es una simple idea. Los responsables del Arousa Fútbol 7 han llevado la creación surgida de «ese espírito do torneo de querer facer as cousas mellor», explica Alberto Diz, a un prototipo, el recogido en la imagen que ilustra la presente información. Y lo que es todavía más importante, se ha llevado al inicio de su proceso de registro oficial por la Oficina de Patentes y Marcas de España.
Dicha entidad, informa Diz, ha aceptado la apertura del expediente. No quiere decir ello que el AF7 disponga ya de una patente. Que lo consiga dependerá del desenlace del correspondiente estudio de la Oficina de Patentes y Marcas de España, que se podría demorar cosa de un año.
Lo realmente importante en este momento del proceso es que «coa aceptación do expediente de inscrición do modelo de utilidade», expresión técnica esta para referirse a invento, «podémonos opoñer hoxe a que se admita calquera outro invento pensado coa mesma utilidade», informa Diz.
«Admitiron o noso expediente porque se considera que o noso invento é algo novidoso, dunha utilidade concreta e susceptible dunha exclusividade». Desde el AF7 creen tener «un prototipo mellorable; querémolo facer máis atractivo, e adaptable a distintas superficies». Lógicamente, confiesa Alberto Diz, la intención última es su comercialización, pero eso es algo en lo que no se trabajará hasta tener el pájaro en mano.
La resolución deberá esperar sobre un año, y si es positiva se podría comercializar el invento
La cita internacional alevín mantendrá número de equipos y segunda previa en la Dallas Cup
Los responsables del Torneo Internacional Alevín Arousa Fútbol 7 han empezado a trabajar ya en la edición del próximo año. Y la intención inicial pasa por mantener el mismo marco de la pasada edición. Esto es, 20 equipos en su fase final en el campo de A Lomba, cuatro de ellos procedentes de la fase previa que desde el jueves al domingo de la Semana Santa se disputa en el estadio Manuel Jiménez. Y también el que salga de la Dallas Cup, el torneo bajo el paraguas de la liga profesional de fútbol estadounidense, que por segundo año volverá a ser subsede de la previa del AF7, explicó Diz. Y ello, después de visto el nivel demostrado por Toronto en el mes de mayo, pero también por la implicación de su afición, la más numerosa de los 20 equipos participantes en la última fase final, informa el portavoz de la organización de la cita internacional vilagarciana.
Tres equipos nuevos
También dentro de su línea tradicional de trabajo, el Arousa Fútbol 7 apostará en principio por una rotación mínima en las 15 plazas por invitación directa a la fase final. Diz explica que la intención es traer en el 2016 tres equipos nuevos, un 20 % de renovación.