Ramos abre la puerta a su salida

IGNACIO TYLKO COLPISA

DEPORTES

Alejandro Ernesto | Efe

El sevillano reprocha al club blanco que difunda su imagen como la de un pesetero

25 jun 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Lejos de abrir el carril de los refuerzos con algún fichaje sonado como el del guardameta David de Gea, el Real Madrid sufre un importante atasco en la operación salida que podría prolongarse a lo largo del verano si no se arreglan las averías que afectan a Iker Casillas y Sergio Ramos, los dos grandes capitanes.

El caso del portero está aparcado a la espera quizá de que el mostoleño regrese de vacaciones y se abran unas negociaciones que se prevén duras. Sabido es que el presidente Florentino Pérez desea su marcha y que Iker aceptaría de buen grado salir si al final recibe una suculenta oferta de algún club de la Premier, consigue la carta de la libertad y la pagan mínimo uno de los dos años que le restan de contrato, a razón de 7,5 millones por campaña.

Le agradaban el Arsenal y Londres pero el inminente fichaje del checo Peter Cech por los gunners, dispuestos a pagar hasta 15 millones al Chelsea, le cerrarían una puerta importante. Desde el Tottenham también han negado un supuesto interés por el veterano cancerbero del Real Madrid, cuyo entorno había reconocido su disposición de moverse a Londres si tocaba emigrar.

El culebrón del defensa sevillano, sin embargo, escenificó ayer un nuevo, y destacado, episodio en la Ciudad Deportiva de Valdebebas, donde estuvo Sergio Ramos, acompañado de su hermano y representante, René, para reunirse con el director general ejecutivo del club y brazo derecho de Florentino Pérez, José Ángel Sánchez.

Se suponía que se trataba de un encuentro, celebrado a petición de Sánchez pero más bien informal, para rebajar la tensión existente, templar gaitas y acercar posturas ahora que aparecen portadas de enfados monumentales y tambores de guerra. Pero Ramos se mostró rotundo, expresó su malestar y trasladó al club su intención, la misma que tiene desde hacer muchas semanas, de irse este mismo verano si no recibe una propuesta de renovación que le satisfaga.

Traspaso

En concreto, según diversas fuentes, el central internacional le pidió al club que, si no desea renovarle, escuche las ofertas que lleguen por él y negocie un posible traspaso, que sería, seguramente, el movimiento más sonado del verano. De momento, se ha dado vuelta de tuerca más que puede acabar destrozando la correa de distribución de uno de los grandes motores del madridismo.

Con 10 campañas, 11 títulos, más de medio centenar de goles, alguno tan importante como el logrado en la final de la Champions de Lisboa que condujo a la «décima» y cerca de 450 partidos a sus espaldas, Ramos no tolera que se le acuse de pesetero, con cifras que no son reales, en filtraciones a determinados periodistas afines al presidente, ni que se cuestionen su profesionalidad y madridismo.

El central, cuyo contrato concluye en el 2017, percibe algo menos de seis millones netos y reclama 10 para prolongar su vínculo, aunque, según sus más cercanos, aceptaría algo menos con tal de seguir en el Bernabéu y, sobre todo, de sentirse valorado por el presidente al menos a la altura de extranjeros como Gareth Bale, ojito del máximo mandatario y que no tiene relación con muchos pesos pesados en la caseta. El Real Madrid le ofreció hace muchos meses una cifra cercana a los siete y no se ha movido de esa cantidad.