La santiaguesa comparte con Galicia la Champions que ganó con el Frankfurt
16 may 2015 . Actualizado a las 16:04 h.Era el mayor reto de su carrera, decía a La Voz allá a finales de septiembre. Acababa de clasificar a España para su primer Mundial (el que se jugará en Canadá desde principios del próximo mes) y se había enrolado en la mejor Liga de Europa, la alemana con el 1. FFC Frankfurt. Ya entonces, apuntaba también hacia la Champions League [ganó 2-1 la final del jueves ante el PSG con un gol en el añadido]. Así de ambiciosa es Vero Boquete (Santiago de Compostela, 1987). Claro que ella siempre ha sido muy consciente de sus posibilidades. Aún ahora, horas después de haberse convertido en la primera española campeona de Europa de fútbol, transmite esa motivación.
-Diga lo que quiera.
-Me encuentro muy feliz. Eso lo resume todo.
-¿Se ha quitado un peso de encima?
-No era un peso, más bien se trataba de una ilusión. Sin duda, la final que perdí el año pasado con el Tyresö contra el Wolfsburgo hace que conseguir esta Champions League sea incluso mucho más especial para mí. Se puede decir que era mi mayor objetivo y lo he conseguido.
-¿Se da por satisfecha?
-Por suerte o por desgracia, me quedan muchas cosas por ganar. Lo próximo que tendré que afrontar será hacer un buen papel en la Copa del Mundo que se celebra en Canadá en apenas unas semanas. Y ya mirando hacia la próxima temporada, quiero seguir aspirando a ganar títulos.
-¿Cómo fueron sus sensaciones a lo largo del partido? ¿Temió por el resultado en algún momento, dada la igualdad mostrada entre ambos equipos?
-Fue un partido tenso, como buena final que era. Esa circunstancia te impide hacer el mejor partido o juego posible, pero creo que tuvimos el ritmo controlado casi en todo momento. En mi opinión, la primera parte fue prácticamente toda nuestra, y durante la segunda perdimos un poco el dominio para recuperarlo después en el tramo final. El gol en el último minuto hace justicia. Creo que fuimos mejores y fuimos el equipo que más buscó la victoria.
-¿Para quien fue su primer pensamiento tras el pitido final?
-Para decir verdad, fue un pensamiento un poco egoísta. He de admitir que pensé en mí. «¡Por fin, ahora sí soy campeona de Europa!», me dije para mis adentros. Pero también es cierto que me duró solo unos segundos. Ya después, pensé en mis padres, mi hermano, mi familia y mis amigos. Todos ellos vinieron a mi mente. Y por supuesto, mis compañeras de Tyresö con las que no pude levantar esta copa el año pasado.
-Y ahora, ¿qué?
-Ahora a seguir, a repetir, a buscar nuevos objetivos y a hacer un buen papel en el Mundial.
-¿Es la próxima Balón de Oro?
-Ese me da igual, ¡yo ya tengo la copa que quería!
«Que las niñas sueñen en grande, porque todo es posible y el futuro será mejor»
El deporte femenino gallego está en plena faena de superarse a sí mismo. Incontables son los hitos alcanzados en los últimos tiempos, con los tres K. O. de Marta Brañas en su debut como boxeadora profesional, la División de Honor de rugbi para el CRAT y, ahora, la Champions League conseguida por Vero Boquete en un episodio sin precedentes en España.
-¿Sientes que ha hecho historia para el deporte?
-Soy plenamente consciente de que soy la primera futbolista gallega en ganar una Liga de Campeones. Y eso es único. No cabe duda. Pero no me gusta demasiado hablar de historia porque para mí es el presente. Sin embargo, no puedo negar que me alegra abrir el camino. Y, esperemos, que sea para muchas otras deportistas.
-¿Será la primera Champions de muchas para Galicia?
-¡Ojalá! A mí me servirá de motivación para buscar más títulos y estoy convencida que habrá más gallegas luchando por algo tan grande.
-¿Ha sentido el aliento de Galicia apoyándole?
-Todo el tiempo. Fue muy especial jugar un partido como este sabiendo que toda mi gente estaba mandando una fuerza conjunta.
-¿Qué queda de la niña que daba sus primeras patadas al balón?
-Muchas cosas. Sobre todo, la ilusión y la pasión por este deporte. El fútbol me hace feliz ahora igual que lo hacía cuando era pequeña. Supongo que ese es el secreto.
-¿Qué les dice a las niñas que ahora empiezan?
-Que trabajen duro y sueñen en grande, porque todo es posible y el futuro será mejor.