Un cuatro y medio

Tito Díaz LA PIZARRA

DEPORTES

25 mar 2015 . Actualizado a las 05:00 h.

Lo primero que llama la atención de Maxi Kleber es su polivalencia y su versatilidad. Es capaz de desempeñar la labor de un cinco, con lo que le da más movilidad al equipo y genera más espacios, o hacerlo de cuatro, de modo que el quinteto en pista es más alto. Es un pívot que puede jugar de cara, que tiene buen tiro exterior, que sabe manejarse de espaldas al aro cuando dispone de ventaja física y es también un buen defensor. Mezcla bien con Triguero o Dani Miller, e igualmente con Keaton Nankivil o Chagoyen.

En cierto modo, es continuador de esa estela de cuatros y medio que tan buenos resultados le está dando al Obradoiro en las últimas temporadas, tras el paso por Sar de Stephane Lasme, Levon Kendall o Mike Muscala.

Otra cualidad que se observa en Maxi Kleber es su madurez, a pesar de que solo tiene 23 años y en esta temporada se le han visto altibajos, como sucede con todos los jugadores. Es, sobre todo, un pívot listo, que sabe jugar según quién le defiende y a quién le toca defender. Está creciendo mucho esta temporada y su futuro es esplendoroso.

En esta parcela también es importante la labor de sus técnicos, que saben cómo sacarle provecho a él y al equipo cuando juega como cuatro abierto o cuando es preferible que se desenvuelva en posiciones más interiores.