Okutu logra un meritorio quinto puesto en la final

La Voz

DEPORTES

VALDRIN XHEMAJ

El atleta de Marín se quedó a trece centímetros del bronce tras hacer un salto de 7,93 metros

07 mar 2015 . Actualizado a las 01:03 h.

La capitana Ruth Beitia, en busca de su duodécima medalla, y el debutante Adel Mechaal recibieron una inyección de moral en la primera jornada de los Europeos en pista cubierta, que deparó un amargo cuarto puesto al lanzador de peso Borja Vivas y un quinto a Jean Marie Okutu en longitud.

Camino de la final, la discípula de Ramón Torralbo, que lleva cinco medallas en la historia del torneo continental bajo techo, ejecutó cinco saltos y sólo falló uno, sobre 1,87, la única altura que pasó a la segunda. Fue una de las siete atletas que saltaron la marca de calificación (1,94). Otras dos pasaron con 1,91.

Borja Vivas, actual subcampeón de Europa al aire libre, perdió en el último instante la medalla de bronce por culpa del defensor del título, el serbio Asmir Kolasinac, que en el último tiro superó no sólo al español, sino también al checo Ladislav Prasil (20,66) para terminar segundo con 20,90. El malagueño, con los 20,59 del quinto tiro, se quedaba a siete centímetros del podio.

«Si me llegan a dejar otro tiro...», fue el comentario amargo del malagueño. «Ahora duele un poquito», admitió.

El alemán David Storl, dos veces campeón mundial y otras tantas de Europa al aire libre, además de actual subcampeón olímpico, fue el único que superó los 21 metros y, finalmente, conquistó su primer oro en pista cubierta.

Okutu suplió con dignidad la baja por lesión de Eusebio Cáceres en la final de longitud. El gallego, que no terminaba de tomarle el punto al pasillo sobre tarima flotante («no me devuelve todo lo que le transmito», decía), compitió sin complejos. Saltó 7,85, luego hizo un nulo y pasó el ecuador del concurso con 7,93 que le situaban momentáneamente cuarto, a dos centímetros del bronce.

La segunda parte del concurso, siempre arriesgando, no le trajo nada mejor. Dos nulos y un abortado salto del adiós (6,07) le dejaron quinto, a trece centímetros de la medalla de bronce.

Adel Mechaal, con un despliegue sin reservas que le dio el segundo puesto en la segunda semifinal de 3.000, batiendo por cinco segundos su récord personal, y el veterano Jesús España -tres veces plata- cronómetro en ristre para pasar por tiempos, estarán este sábado en la final que cierra el programa.

Con un tiempo de 7:46.92, Mechaal sólo cedió en la segunda serie ante el turco de origen keniano Ali Kaya (7:45.65), bronce el año pasado en los 10.000 de los Europeos al aire libre de Zúrich. Por detrás, el poderoso esprint de Jesús España le llevó hasta el octavo puesto con 7:51.56, desalojando de la repesca al ovetense Carlos Alonso, que había sido quinto en la primera serie con 7:52.82.

También lucieron Indira Terrero, que después de su bronce al aire libre estará, siete meses después, en la final bajo techo de 400 gracias a su tercer puesto en la primera serie con 53.16, y Kevin López, ganador de su carrera en 800. El sevillano aspira a permanecer en el podio por tercera edición consecutiva, después de ganar el bronce en 2011 y la plata en 2013.

Junto a Kevin estará en semifinales el castellonense David Palacio, que cruzó la meta tercero en la primera serie con 1:48.33. Había salido a cola del grupo, progresó hasta el tercer puesto en la penúltima vuelta, adelantó uno más a falta de 200 y cedió una plaza en el último giro. Su marca, tercera en el ránking general, le valió, por supuesto, la repesca.

En la quinta serie, Luis Alberto Marco cometió el primer borrón de su carrera en este torneo. Se instaló en el tercer puesto tras la salida y no hubo cambios hasta la penúltima vuelta, en la que cedió dos posiciones. Las recuperó al final, pero su tercer puesto en una carrera lenta (1:50.01) le dejó fuera. El sevillano, plata en 2009, nunca había faltado a una final en cuatro actuaciones.

Terrero necesitaba terminar entre las tres primeras, y en su semifinal, la primera, partía con el quinto registro. La habanera estaba cuarta en el primer paso por meta, pero tuvo fuerzas para batir a la británica Kirsten Mcaslan en el esprint.

El palmero Samuel García, que había superado la primera criba en la repesca con 47.26, estuvo lejos de acceder a la final. Con su mejor marca hecha este año (46.80), partía con el peor registro de su serie, y aún así se batió en la primera mitad con entusiasmo, pero lo pagó al final, llegando sexto y último con 47.95.

Josephine Onyia se quedó a dos centésimas de la final de 60 metros vallas, al clasificarse quinta en la segunda serie con 8.04 segundos, el mismo tiempo que había marcado la primera ronda.