El duelo entre Cristiano Ronaldo y Leo Messi es el más galáctico de la historia

antón bruquetas REDACCIÓN / LA VOZ

DEPORTES

RUBEN SPRICH | Reuters

Mejores números globales para Messi, pero Cristiano supera al argentino en las últimas temporadas

14 ene 2015 . Actualizado a las 09:40 h.

Hubo gestos de complicidad entre los dos el lunes durante la gala del Balón de Oro en Zúrich. Porque tanto Cristiano Ronaldo (Funchal, Portugal, 1985) como Leo Messi (Rosario, Argentina, 1987) son conscientes de que se necesitan, de que se retroalimentan en su carrera por trascender al momento, por entrar con letras mayúsculas en la historia del fútbol.

De lo que no cabe la menor duda es que las cifras de Cristiano Ronaldo y Leo Messi asombran. Desde que juegan en la misma liga, promedian más de un gol por partido. Ese solo dato sostenido durante casi cinco temporadas y media da describe la magnitud de los dos referentes actuales en el mundo del balón, dos jugadores totales, con una voracidad insaciable. Quien gane este duelo, el más galáctico que haya existido jamás, tiene garantizado un sillón entre los más grandes de siempre, pero si este pulso mantiene la misma intensidad en el futuro, quizás el portugués y el argentino acaben triunfando juntos en esa guerra.

En términos globales y aunque ambos están muy parejos en las estadísticas, Messi presenta mejores números que Cristiano. Tiene más títulos individuales y colectivos y ha marcado más goles y repartido más asistencias. Pero lo que se aprecia a la hora de analizar los datos y que también ha encontrado su reflejo sobre el terreno de juego, es que el crac de Madeira ha conseguido invertir el signo de esta batalla. Mientras en las primeras temporadas vestido de blanco, el rosarino le pasó por encima -especialmente llamativas son las cifras de Messi con su club en la 2011/2012, donde logró 73 goles y repartió 28 asistencias en 60 partidos, paradójicamente ese año ganó el Real Madrid la Liga y fue el de la despedida de Pep Guardiola del conjunto culé-, en la pasada temporada y el comienzo de este curso, Cristiano ha emergido por encima de todos.

En este sentido, el portugués cerró la pasada campaña con 51 goles y 14 asistencias en 47 partidos, por los 41 goles y 14 asistencias en 46 partidos que dejó Messi. Esta supremacía se ha visto refrendada en los primeros compases de la nueva temporada. 33 goles y 12 asistencias en 28 partidos frente a los 24 y 10 en 24 encuentros. El bajón de juego que ha experimentado el Barcelona tras dejar atrás el ciclo más deslumbrante en la vida del club y los constantes problemas fuera del fútbol que ha pasado Messi -entre ellos, sus cuentas pendientes con Hacienda que lo llevaron a estar imputado, junto a su padre, por fraude fiscal- han impactado de lleno en el rendimiento de un talento inigualable cuando conduce la pelota pegada a sus botas. A Messi le ha faltado en los últimos tiempos el desborde y la imaginación que lo hicieron admirable.

En el otro lado de la balanza, Cristiano y el Real Madrid. La salida de José Mourinho del banquillo de Chamartín y el fichaje de Carlo Ancelotti para ocupar su lugar consiguieron que la calma regresase a Concha Espina. Y con esta tranquilidad, con el trabajo diario, los resultados. Sin la crispación del pasado, el técnico italiano ha sacado el máximo partido a una plantilla de lujo en la que resplandece por encima de todos sus compañeros Cristiano Ronaldo. Del portugués dicen las personas que lo ven en cada entrenamiento en Valdebebas que está obsesionado con mejorar, con alcanzar la perfección.

La clave hacia el futuro

Y esta entrega de Cristiano puede resultar clave para que siga manteniendo esa posición de privilegio en la cima del fútbol durante las próximas temporadas. Messi tiene ganada de antemano la partida contra la edad. Sus dos años menos le garantizan ese margen que deberá gestionar con mimo, porque a los dos les sobra rodaje. Fueron jóvenes prodigios que ascendieron a la élite con apenas 17 años. Y lo hicieron para quedarse, para soldarse a la retina del espectador. Promedian aproximadamente 5.000 minutos por temporada en las competiciones más exigentes y apenas han tenido lesiones de trascendencia -quizás Cristiano con su tendinitis sea el más castigado en este aspecto-. Buena prueba de que saben cuidarse. Ahora solo les queda un Mundial para no dejar dudas, para que nadie los ponga por debajo de los más grandes, de los Maradona, Di Stéfano, Cruyff o Pelé.