El Andorra solo consiguió en cancha ajena una de las cinco victorias que tiene
10 ene 2015 . Actualizado a las 10:23 h.El Obradoiro Rio Natura Monbus disputará hoy (20.00 horas) ante el Andorra su último partido de la primera vuelta en Sar. Tras competir en las últimas semanas y de forma consecutiva contra los conjuntos más potentes del campeonato (Real Madrid, Barcelona, Unicaja y Bilbao), el colectivo que prepara Moncho Fernández afrontará este último compromiso en casa ante uno de los equipos de su liga, un rival con mucho oficio y que suma dos triunfos menos que los gallegos.
El Obra, que llegará a este segundo encuentro del año con varios jugadores afectados por un proceso vírico, confía en mostrar su mejor versión defensiva para sacar adelante este compromiso. El cuadro compostelano tendrá enfrente un adversario que cuenta con una plantilla muy veterana, con la suficiente experiencia para complicarle la vida a cualquiera. Un adversario con oficio y que en este primer tramo de la competición tuvo bastantes problemas con las lesiones. El Andorra supo reforzarse con jugadores de nivel y, al mismo tiempo, dio continuidad a sus mejores elementos del curso pasado.
Moncho Fernández destaca que el Andorra cuenta con jugadores «muy trabajadores» y señala que son varios los integrantes del plantel que le dan cierto peso a este equipo, como Ivanov, Sada, Bogris y Green. Un Andorra que viene de perder en su pista ante el potente Real Madrid por 70-79, un marcador muy ajustado y que muestra las dificultades con las que se pueden encontrar esta tarde los santiagueses. Ante el conjunto blanco destacaron Thomas Schreiner, Kaloyan Ivanov, con trece puntos cada uno, y Betinho Gomes, con 8. Solo en el último cuarto pudieron los de Pablo Laso deshacerse de los andorranos.
Una victoria fuera
El entrenador del conjunto santiagués no se fía de un rival que en cancha ajena solo consiguió una victoria en el presente curso deportivo. Sin embargo, y aunque sus números como visitantes no son gran cosa, Moncho Fernández reconoce que el Andorra maneja «muchos registros defensivos». Además, es un equipo que tiene un buen ritmo de juego, con jugadores que «alargan las posesiones, son listos y saben en donde está el compañero». Subraya el de Pontepedriña que el Andorra es un equipo «muy difícil de jugar».