Sobre la llegada de Sebastian Vettel en lugar de Fernando Alonso, el máximo responsable de la escudería Ferrari, Sergio Marchionne, usó un tono irónico. «Espero lo mismo de un piloto alemán que de uno español, que pilote el coche como alma que lleva el diablo y que gane carreras. Su papel en la vida es la de correr y ganar», remarcó sobre el tetracampeón del mundo. «Sebastian no es un ingenuo, sabe de dónde partimos», añadió. «No soy un mago. Tenemos que trabajar como equipo, eso es lo más importante», apuntó Arrivabene.
También tuvo palabras para el reglamento de la fórmula 1 y lamentó que parezca «un laberinto construido realmente mal». «Si queremos lo mejor de este deporte debemos simplificar todo y hacerle la vida más fácil a quienes trabajan. Al leer estas reglas parecen escritas por cuatro amigos en un bar», analizó.