Cardenal espera que Villar rectifique y apruebe el 22 las nuevas normas contra la violencia
DEPORTES
El presidente del Consejo Superior de Deportes, Miguel Cardenal, aseguró ayer que esperan que la Federación Española de Fútbol (RFEF) apruebe el próximo día 22 en su Junta Directiva las modificaciones normativas acordadas para luchar contra la violencia en el fútbol, después de no haberlo hecho el día 15 como se había comprometido.
«Es cierto que la Federación se comprometió a aprobar el día 15, por lo tanto no ha cumplido el compromiso que adquirió, pero esperamos que rectifique y que en la Junta Directiva y Comisión Delegada del día 22 aprueben definitivamente el texto de los artículos nuevos y cumplan con el compromiso adquirido», dijo Cardenal tras una rueda de prensa.
El CSD anunció el pasado día 15 que adoptará «las medidas coherentes con el nuevo escenario creado por el incumplimiento» de la RFEF, que se había comprometido a modificar su normativa disciplinaria para ese día y no lo hizo, aplazando la reunión de la Comisión Delegada para el 22.
El futuro de Villar
Cardenal, preguntado por los periodistas, no consideró que se deba establecer una relación de causalidad entre el incumplimiento de los plazos por parte de la RFEF y la permanencia en el cargo de su presidente, Ángel María Villar.
«No, no creo que se pueda hacer una relación causa-efecto. Lo importante es que se cumpla lo comprometido y aprueben de una vez estos textos que necesitamos para ser eficaces en la lucha contra la violencia en el fútbol», dijo.
«Se comprometió a hacerlo el día 15, no lo ha hecho, y esperamos que lo haga el día 22», finalizó Miguel Cardenal.
Desde que Jimmy fue asesinado en Madrid el 30 de noviembre, Ángel María Villar no se ha dejado ver en público en España. El presidente de la federación española ha evitado ir a cualquier reunión convocada al respecto, agrandando así aún más las diferencias que mantiene con Miguel Cardenal.
Ambos representantes deportivos están enfrentados desde hace meses. Cardenal acusa a Villar de no querer recibir la ayuda que le corresponde al fútbol modesto de las quinielas para no tener que hacer públicas sus cuentas ante el Consejo Superior de Deportes.