El Teucro vive otra semana dulce tras ganar al Go Fit Sinfín y encadenar así su décima victoria en otros tantos partidos, con la que además ha ampliado a seis puntos su ventaja respecto a sus perseguidores. Sin embargo, ni siquiera esto ha logrado modificar el discurso sosegado de un Quique Domínguez que, aunque no niega su satisfacción, insiste en que no es momento de sacar pecho, e incluso es capaz de encontrar aspectos a mejorar en su equipo.
Así, respecto al duelo del pasado sábado, el técnico teucrista afirma que «el comienzo nuestro fue buenísimo, aunque después el partido cambió porque hubo demasiadas incidencias que hicieron que no fuese muy lucido». Por ello, no duda en asegurar que está «contento, pero el juego hubo momentos que me hubiera gustado que fuese mejor».
Atendiendo a la tabla, el técnico pontevedrés admite que la trayectoria que están firmando, con pleno de victorias, era difícil de imaginar a priori. Pero, a la vez, reconoce que «uno siempre tiene la ilusión y la ambición de aspirar a lo máximo, y ya dije en pretemporada que el equipo me transmitía muy buenas sensaciones».
Cumplido ya el primer tercio de liga, Domínguez también reconoce que es difícil obviar que el Teucro se ha convertido para casi todo el mundo en el equipo a batir, aunque él sigue evitando hablar abiertamente de luchar por el ascenso. «Entiendo que estando líderes y con seis puntos sobre el segundo se hable de cotas mayores, pero sigo diciendo que con 20 partidos por delante todavía hay mucha tela que cortar». Por ello, insiste en que «nosotros marcamos en rojo como meta al principio buscar la victoria jugando lo mejor posible y ese objetivo sigue intacto, aunque a veces hay que recordarlo para no caer en la autocomplacencia».
Sin confianzas ante el Bordils
Precisamente, en referencia a esa posible autocomplacencia después de ganar al Atlético Valladolid y el Sinfín, sus más inmediatos perseguidores, Domínguez avisa de la necesidad de que sus jugadores afronten la próxima jornada con la máxima concentración, dado que afirma que «el que conoce esta categoría sabe que nadie va a Bordils a ganar fácil».
En este sentido, el entrenador azul recuerda que el feudo catalán cuenta habitualmente con un «ambiente espectacular y un público muy caliente». Por ello, insiste en que tendrán que «estar preparados y hacer las cosas muy bien para llevarse los puntos».