El portero de origen gallego Urko Pardo habla sobre el partido de hoy Apoel-Barça
25 nov 2014 . Actualizado a las 11:44 h.Nadie mejor que un portero sabe el vértigo que produce tener enfrente una delantera de antología, capitaneada por Leo Messi, el hombre que acaba de batir el récord de goles de Zarra en la Liga y que esta noche podría liquidar el de Raúl en la Champions. Además, para Urko Pardo (Bruselas, 1983), el guardameta del Apoel chipriota contra el que se mide el Barcelona en Nicosia (20.45 horas, TVE1), la voracidad del argentino no le es desconocida. Nacido en Bélgica, de padre vasco y madre gallega -en concreto, de Vilalba-, coincidió con el 10 azulgrana en la Masía, donde estuvo ocho temporadas. Ahora, el destino, como ya ocurrió en el partido de ida (en el que el Barça ganó por un escueto 1-0), los volverá a juntar sobre el césped. Uno buscará seguir incrementando su leyenda; el otro, demostrar que el fútbol es un juego donde a los humildes se les reserva el derecho a disfrutar.
«Aquí hay una gran expectación por el partido. Te lo puedes imaginar. Se ha vendido todo y la gente está desesperada por conseguir una entrada», comenta Urko Pardo, mientras descansa en las horas previas a este encuentro de la penúltima jornada de la fase de grupos de la Liga de Campeones. «En el Barça son todos jugadores increíbles, pero Leo es un fenómeno y verlo jugar, un placer», destaca el portero, que recalca el privilegio de poder participar en este tipo de choques: «Nos ha tocado un grupo muy difícil en el que nos medimos a gigantes de Europa. De todos modos, en el Apoel somos conscientes de nuestras limitaciones, pero tampoco le tenemos miedo a nadie. Todo lo contrario. Lo de mañana [por el partido de hoy] es un premio, un momento para disfrutar».
Con esta mentalidad, que mezcla la modestia de quien conoce que sus virtudes son inferiores a las del rival con la idea de que el objetivo de la temporada se cumple al entrar en la gran competición continental, el Apoel ha logrado este año poner contra las cuerdas al Paris Saint Germain y al propio Barcelona, que hasta hoy solo fueron capaces de doblegarlos por la mínima. Aunque, Pardo advierte de que este Barcelona ha madurado con respecto al que saltó al Camp Nou: «Después de la renovación que ha sufrido el equipo, los jugadores todavía se están aclimatando. Pero se les ve cada vez más compenetrados y será complicado poder frenarlos. De lo que estoy seguro es de que a nosotros el partido nos servirá para aprender, para seguir creciendo como grupo... equipos de este nivel siempre te ayudan a mejorar».
«¿Si sería un sueño mantener la portería a cero? No, hombre no. Un sueño, no. Esto es solo fútbol. Como digo, algo para disfrutar... un sueño es tener trabajo, que tu familia tenga salud... eso sí que es un sueño. Si conseguimos que no nos marquen, al final del partido estaríamos muy muy contentos, pero nada más», indica el futbolista que dio sus primeros pasos en el Anderlecht.
Regresar al fútbol español
A nivel personal, Urko Pardo, que se ha consolidado como titular en la portería del Apoel y vive uno de los mejores momentos de su carrera, en la que saltó desde el Barça B al Cartagena y Sabadell, y después a Rumanía y Grecia antes de aterrizar en Chipre. «Estoy mejor -destaca- que cuando tenía 20 años. Incluso físicamente. Sigo un plan de alimentación especial y entreno como nunca, pero lo que más me llena es que cada año siento que sigo progresando y espero mantener esta sensación hasta que el día que me retire».
En este sentido, el portero no descarta en un futuro regresar al fútbol español. «Ya hubo contactos otros años [uno de ellos, con el Deportivo de La Coruña], pero nunca terminaron de cuajar, porque es complicado que en España encuentre las mismas condiciones o un equipo en el que pueda estar en la Champions o en la Europa League. Aquí, por el momento, estoy muy cómodo, aunque está claro que la idea de volver a veces ronda por la cabeza», destaca. «Después de mañana [por hoy] nos toca volver a centrarnos en la liga. Hacerlo bien, nos da el derecho a disfrutar».