Dice afrontar uno de los retos «más grandes» de su carrera
30 oct 2014 . Actualizado a las 14:04 h.Casi una década después de su primera experiencia en el Viveiro Club de Fútbol Jesús Gayol retorna a Cantarrana con el objetivo de despertar a un equipo al que una racha de un solo punto en cinco partidos ha conducido a los puestos de descenso a Primera Autonómica. En la dilatada trayectoria del estratega focense destaca haber disputado una promoción a Segunda B con el Xove Lago o un ascenso a Tercera con el Mindoniense, aunque, para él, el de resucitar a un histórico en apuros será uno de los retos «más grandes» que jamás ha afrontado.
-Después de haber ascendido al Valadouro, ¿tenía ganas de volver ya a los banquillos?
- Podía aguantar aún un tiempillo más tranquilamente. No era ninguna locura [se ríe].
-¿Cómo cree que le recibirá la grada de Cantarrana?
-Yo creo que a todos los que vengan a ayudar en este momento los recibirán bien. Pero sinceramente prefiero que reciban mejor a los futbolistas, porque en el momento en el que están ahora, siendo un grupo tan joven, les vendrá muy bien tener toda la ayuda posible por parte de la afición.
--¿Se esperaba la destitución de Pablo Iglesias?
- Cuando a principio de temporada se confeccionaron los equipos y vi lo que había me esperaba que el Viveiro estuviese un poco más arriba. Posteriormente, vista la larga lista de importantes bajas, es normal que lo hayan acusado. Al final en esto del fútbol cuando las cosas no salen bien el que paga los platos rotos es siempre el entrenador.
-Salvando las diferencias, la situación recuerda a la de su primera etapa en el Viveiro.
-Sí, la verdad es que sí. La otra vez era en Tercera y con un concepto que cambia enormemente. Entonces eran 13 partidos y solo seis puntos; una situación mala pero había dos grandísimos porteros y jugadores incluso de Primera y Segunda División; estaban Manel, Kiko Rey, Bossa, Manu, Álex Díaz? Esta vez tenemos un equipo joven, con muchos chicos que vienen del juvenil; es por lo que ha apostado el club y con eso trabajaremos. Creo que tienen la suficiente calidad pero necesitan de algún veterano que los guíe un poquito y han tenido la mala fortuna de que esos veteranos han pasado tiempo lesionados. Cuando podamos recuperar a esos futbolistas y cortar esta hemorragia de goles en contra, llegarán los resultados y la tranquilidad.
-¿Le trae buenos recuerdos este club?
-Por supuesto. No cabe duda de que el Viveiro es el equipo motor de A Mariña. Aunque ahora el Ribadeo esté por encima, no podemos olvidar la historia, los años que estuvo en Tercera, las promociones que jugó. El Viveiro siempre está en la mente de cualquier jugador y cualquier entrenador de la zona; el que diga otra cosa está mintiendo. Claro que me gustaría poder escoger unas condiciones mejores, pero hay que venir cuando llaman a uno y voy a trabajar para devolver la confianza que esta directiva ha depositado en mí.
-¿No tuvo ninguna duda cuando recibió la llamada de Alfonso de Carlos?
-Estaba sin entrenar y, por supuesto, estoy muy contento de volver al Viveiro. Sé que la situación no es buena y es uno de los más grandes retos que he afrontado como entrenador, lo que hace que tenga ganas de esforzarme más que nunca para superarlo. La ayuda de los jugadores será fundamental.
-¿Va a mantener la filosofía futbolística que Pablo Iglesias intentó implantar?
-Cuando me examiné del carné de táctica en A Coruña e hice el examen de práctica con un equipo juvenil, un entrenador nos dijo: ?Ustedes no se preocupen, que ya están aprobados. ¿Cómo le voy a discutir la táctica a nadie? La táctica buena es la que gana?. Para nosotros la táctica buena también será la que hace puntos. Por lo que vi el domingo, el equipo tiene mucha ansiedad, no se puede permitir el lujo de perder el balón en el primer cuarto de campo propio porque eso son goles y los goles son pérdida de puntos. Cualquiera sabe que lo único que tenemos que hacer es sumar, y para eso lo más importante es dejar la portería a cero. Tenemos que ayudarnos más en el campo y estar más juntos; si no encajamos nuestra calidad nos hará tener muchas más posibilidades de ganar partidos.
-¿Qué caracterizará a su Viveiro?
-Lo que ha caracterizado a todos mis equipos. Hay que morir en el campo, morir por este escudo y por esta camiseta. Eso es irrenunciable. A partir de ahí, si se puede jugar bien, como ya lo hizo el Viveiro en mi primera campaña aquí, mucho mejor. Cambian los tiempos y las circunstancias, pero el jugar bien nunca está reñido con sacar puntos.
-¿Cree que debe exigir un paso adelante a algún jugador en concreto?
-El paso adelante deben darlo todos los futbolistas. Todos estamos metidos en esto y, aunque el entrenador se considere el máximo responsable, él no juega. Yo solo estoy para ayudarles a hacer las cosas bien.
jesús gayol nuevo entrenador del viveiro