A Contador le gusta la dureza del Tour 2015 y Froome se plantea no acudir

Agencias / La Voz REDACCIÓN

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Nibali, durante la presentación del Tour 2015
Nibali, durante la presentación del Tour 2015 YOAN VALAT | Efe

Después de conocer el recorrido, el Movistar piensa en Nairo Quintana como líder para la prueba

22 oct 2014 . Actualizado a las 16:40 h.

Alberto Contador se ha mostrado satisfecho al conocer el recorrido del Tour de Francia 2015, que es de su gusto ya que es «más duro que los últimos años» y, a pesar de que le «exigirá recuperar bien tras el Giro de Italia», reveló que lo va a «preparar a tope». En declaraciones facilitadas por su equipo, el corredor madrileño aseguró que deberá llegar a la próxima edición de la ronda gala «en forma porque es muy exigente al principio» y agregó: «Es un Tour que me gusta. Es más duro que los últimos años y me exigirá recuperar bien tras el Giro de Italia pero lo voy a preparar a tope».

Contador, que el pasado año debió abandonar el Tour por una caída en la que se fracturó la tibia, dijo que la propuesta de la organización le exigirá «llegar en un buen estado de forma porque empieza con una contrarreloj corta, pero en la que se harán diferencias». «En general, es un Tour en el que hay que llegar fresco al final, pero al que también hay que llegar en forma porque es muy exigente al principio», abundó. Dos finales en alto marcarán la primera parte de la prueba, que concluirá con una contrarreloj por equipos «a la que será importante llegar sin haber perdido corredores por caídas o enfermedad, porque una etapa así no es lo mismo hacerla con el equipo completo que con dos corredores menos», analizó.

El ciclista de Pinto, ganador de la última edición de la Vuelta a España, considera clave «salir de la primera parte sin haber perdido tiempo en la general, ya que será en la montaña donde se va a jugar un Tour especialmente exigente debido a tantos finales en alto». «Los finales en Pirineos serán muy importantes, lo mismo que la llegada a Mende. Es un final que conozco muy bien y en el que, a pesar de ser corto, se hacen diferencias», subrayó Alberto Contador.

Por su parte, Chris Froome, ganador en el 2013 y segundo en el 2012, amenaza con no acudir a la ronda gala, al considerar que está pensada para un escalador y que tiene pocos kilómetros contra el reloj. «El Tour del año próximo es montañoso y la contrarreloj tendrá poca importancia, lo que significa que se decidirá en la alta montaña. Será una carrera dura y exigente», analizó el británico nacido en Kenia en su web.

Ante ello, el ciclista del Sky, cuyo equipo estuvo en pleno ausente de la presentación del Tour 2015, afirmó que analizarán «atentamente» el recorrido de las tres grandes antes de decidir cuales correrán. «Me veo como un ciclista de grandes vueltas equilibradas y el Giro, con su larga contrarreloj de 60 kilómetros y algunas llegadas difíciles en montaña, será muy equilibrado y se adapta bien a mis características», agregó. Froome señaló que, de correr la ronda italiana, además tendría opciones de disputar la Vuelta a España «con opciones serias de perseguir la victoria». «En el pasado siempre me he concentrado en una gran vuelta por temporada pero puede ser una buena oportunidad para mi de perseguir dos», indicó el ciclista, quien matizó que «es todavía pronto para tomar una decisión» y que lo hará en concertación con el resto del equipo.

Mientras, ante las siete etapas montañosas y cinco llegadas en alto del Tour 2015, el director del Movistar, Eusebio Unzúe, consideró que se adapta como un guante al colombiano Nairo Quintana. El joven escalador de Boyacá, segundo en la edición del 2013 y ausente este año, sería uno de los favoritos de la edición del próximo, porque apenas hay 14 kilómetros de contrarreloj individual, la disciplina donde más tiempo podría ceder.

«Viendo este recorrido es fácil pensar que debe estar Nairo», aseguró Unzúe, el único representante de Movistar presente en el Palacio de Congresos de París para la presentación del Tour. El director deportivo aseguró que el perfil del Tour es «un guiño a los escaladores», sinónimo en Movistar de Quintana, que el año pasado dejó su plaza de jefe de filas a Alejandro Valverde para apostar por el Giro de Italia con la consigna de bregarse en una gran vuelta antes de afrontar como favorito la más dura de todas. «Éste es un Tour para escaladores a condición de que se supere la primera semana», indicó Unzúe. Similar reacción tuvo el italiano Vincenzo Nibali, quien vio con buenos ojos el recorrido del Tour 2015, que le recordó al de este año, cuando se alzó victorioso en el podio de los Campos Elíseos. «Me viene bien, me recuerda al Tour de este año, con una primera semana muy complicada», afirmó el ciclista del Astana que asistió en París a la presentación de la edición próxima. También se mostró satisfecho por la inclusión de los tramos adoquinados en la cuarta etapa, un terreno en el que el año pasado logró ventaja con el resto de los favoritos.

«Me gusta que vuelva a estar, aunque sigo sin ser un especialista. No soy un corredor de la Roubaix, el año próximo puede ser diferente», señaló. El italiano achacó que los organizadores hayan reducido el número de kilómetros contrarreloj a su deseo de aventajar a los franceses, como Thibaut Pinot, tercero en la pasada edición y que suele ceder tiempo en ese terreno.