Rafa Nadal sufre un principio de apendicitis en un año plagado de lesiones

Efe

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JASON LEE | Reuters

El tenista español arrancó la temporada con dolores de espalda en el Abierto de Australia a lo que le siguió la lesión en su muñeca derecha

08 oct 2014 . Actualizado a las 11:09 h.

Rafa Nadal sufre un principio de apendicitis a pocos días de que arranque el torneo de Shanghai. Una dolencia más en lo que va de temporada que comenzó con la lesión de espalda en el calentamiento de la final del Abierto de Australia, y a la que le siguió una desinserción de la vaina del cubital posterior de la muñeca derecha a finales de julio.

En su conferencia de prensa previa del penúltimo Masters 1.000 de la temporada, donde está previsto que juegue este miércoles contra su compatriota Feliciano López, Rafa Nadal admitió que sufrió un principio de apendicitis este sábado, pero también adelantó que tras probarse este martes durante 45 minutos de entrenamiento en una de las pistas exteriores del estadio Quizhong intentará competir en el torneo de Shanghai.

Rafa Nadal explicó que el sábado por la noche, a su llegada a Shanghai, empezó a sentir un fuerte dolor estomacal, por lo que fue al hospital el domingo por la mañana. Ante la opción de los médicos locales de operarse o de intentar aplicar, si no, un fuerte tratamiento de antibióticos, que en ocasiones es efectivo, optó por lo segundo, y desde entonces, tras dos días de recuperación, Rafa Nadal ha asegurado que se siente cada vez mejor.

Con todo, Nadal es consciente de que es posible que necesite ser intervenido, tarde o temprano, como le sucedió a su compatriota Guillermo García-López, que retrasó esta intervención varios meses hasta que se operó en marzo del año pasado, pues confiarse podría ser arriesgado y el problema podría resurgir en un futuro, «por ejemplo en Australia», dijo.

«Por el momento no he podido pensar mucho en eso todavía, sólo que aún estoy en Shanghai, y que quiero intentarlo», aunque por supuesto, aclaró que en cuanto regrese a España y le vean sus médicos discutirá con ellos cuál es la mejor opción para tratar el problema.

Rafa Nadal ha confirmado que está todavía bastante débil, tras pasar prácticamente 48 horas en cama y con una dieta muy ligera, pero ya que se encuentra en Shanghai, prefiere intentar competir, aunque esperará, poco antes del partido de mañana, a ver cómo se encuentra en las próximas horas, para decidir del todo si jugará o no.

El español dijo no sentirse frustrado por encontrarse con este problema después de haberse recuperado de su última lesión. «Ha sido un accidente», afirmó, una «mala suerte» que, dentro de la situación, al final ha resultado evolucionar hacia cierta «buena suerte», dijo, dado que no ha tenido que pasar por el quirófano por el momento.

«Después de más de 60 horas desde que tuve los primeros dolores, el riesgo de que empeore es cada vez menor», afirmó Nadal, aunque «todo puede pasar». A pesar de que «obviamente la situación no es la ideal, quiero intentarlo», reiteró. «No es que esté bien, porque al final llevo más de 48 horas en cama y sin poderme mover, y encima con los antibióticos un poquito agresivos, así que me siento un poco bajo de defensas, un poquito flojo, pero he mejorado un poquito cada día, y espero seguir mejorando para mañana», dijo.

«Sé que no voy a estar en las condiciones ideales, pero también sé que a estas alturas y estando aquí en Shanghái, el único riesgo es lesionarse: perder o no jugar es exactamente lo mismo a día de hoy, y no es que estemos en un momento en el que vaya a afectar a la confianza el perder un partido o no perderlo», concluyó.

«Me siento mejor que ayer»

De hecho, Rafa Nadal ha pasado brevemente por la pista de entrenamiento durante 45 minutos. «Las sensaciones (en la pista) no son las mejores, pero me siento mejor que ayer y que antes de ayer», aclaró. «Todo está un poquito removido y no está perfecto, me duele aquí abajo (señaló en el abdomen), lo que pasa es que me duele menos», insistió.

En el entrenamiento no forzó mucho ningún movimiento para no correr riesgos innecesarios, explicó, pero reconoció que todavía esta tarde, se va moviendo más, le duele «un poquito más», aunque «cada día la evolución ha sido un poquito mejor, y espero que para mañana sea un poquito mejor aún». «Vamos a intentarlo, y si no se puede, no se puede, hay que ser honesto con uno mismo y yo normalmente lo soy, así que lo voy a intentar, pero sin ningún drama y sin intentar ir más allá, que lo más importante al fin y al cabo es la salud», indicó.

Además, recordó que ya había dicho en el Abierto de China en Pekín, la semana pasada, que tras su reciente lesión tampoco esperaba ningún resultado en especial para los dos torneos de China, aparte de jugar y llegar lo más lejos posible. «Lo bueno es que lo localizamos al principio y tuvimos la suerte de evitar el quirófano», comentó.